Venezuela está dispuesta a estructurar un plan a tres meses para ayudar a la paz de Colombia, que vive una crisis en la región del Catatumbo, ubicada en la frontera entre ambos países, a raíz de los combates entre la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y una disidencia de las FARC, informó este sábado el mayor general chavista, Vladimir Padrino López.
A través de un comunicado, se refirió a la reunión que sostuvo este viernes con el ministro Defensa colombiano, Iván Velásquez, en la ciudad venezolana de San Cristóbal, en el estado Táchira, en la que abordaron “la situación general fronteriza” y, en especial, la “compleja problemática” en la región de Catatumbo, del departamento colombiano de Norte de Santander.
“Hemos reiterado la entera disposición de colaborar, aumentando niveles de comunicación y estructurando un plan a tres meses para ayudar a Colombia a construir y consolidar su paz, con base en las experiencia exitosas que hemos desarrollado en nuestro territorio”, agregó el funcionario castrense.
Por otra parte, aseguró que Venezuela “no sirve, ni servirá jamás, de plataforma para grupos armados al margen de la ley, sea cual sea su naturaleza, ideología o nacionalidad” y resaltó los “esfuerzos” en la lucha contra las “distintas formas de organización criminal dedicadas al narcotráfico, el paramilitarismo, la minería ilegal, el contrabando”.
“Rechazamos categóricamente la campaña de desinformación orquestada por personajes con oscuros intereses, que pretenden involucrarnos con alguna de las facciones”, reza el comunicado, que ratifica que Venezuela seguirá prestando asistencia humanitaria a los colombianos desplazados.
Los enfrentamientos entre el ELN y el Frente 33 de las disidencias de las FARC han dejado entre 60 y 80 muertos según los conteos de la Defensoría del Pueblo de Colombia y la Gobernación de Norte de Santander, de los cuales solo se ha podido recoger 41 cuerpos por la situación que siguen viviendo zonas rurales alejadas del Catatumbo, donde las autoridades aún no han podido acceder.
Además hay más de 36.000 desplazados, sobre todo en la capital departamental, Cúcuta, y en los pueblos de Ocaña y Tibú, incluidas 700 personas diarias entre el 17 y el 19 de enero a Venezuela.
Igualmente, 395 personas han sido “extraídas” (retiradas de la zona), según el Gobierno colombiano, entre ellos 14 firmantes de paz y 17 de sus familiares.
Con información de EFE