Familiares de pacientes recluidos en el Hospital Universitario Dr. Manuel Núñez Tovar de Maturín, denuncian la casi paralización del servicio en el Banco de Sangre, debido a la falta de reactivos y las bolsas donde se almacena la sangre.
Por: Corresponsalía lapatilla.1eye.us
Marta Pérez, proveniente de Punta de Mata, al oeste de Monagas, relató la desesperación que siente al ver cómo la salud de su sobrina, paciente oncológica con una hemoglobina crítica de apenas tres puntos, se deteriora día a día.
La mujer viajó con la esperanza de conseguir una transfusión sanguínea que pudiera salvar la vida de su familiar, pero se topó con la cruda realidad de un banco de sangre paralizado.
“Me dijeron que no estaban realizando transfusiones ni serologías. Es una situación desesperante. Mi sobrina necesita esa transfusión con urgencia, pero no sabemos qué hacer”, lamentó Pérez.
La falta de reactivos en el banco de sangre es la principal causa de esta paralización, según denunció Ana Caldera, otra paciente afectada.
“Es una situación que pone en riesgo la vida de muchas personas. Hacemos un llamado urgente a las autoridades del estado para que tomen cartas en el asunto y doten al banco de sangre de los recursos necesarios”, exigió Caldera.
La situación se agrava aún más al conocer que los donantes de sangre deben llevar sus propias bolsas para la recolección, y que la sangre donada se almacena sin procesar hasta que haya reactivos disponibles.
“Por favor, gobernador, envíe los reactivos al banco de sangre; hay muchas personas que necesitan que su sangre sea procesada para exámenes de transfusión y operaciones”, insistió Caldera.
Estas denuncias ponen de manifiesto la precaria situación del sistema de salud en Monagas y la vulnerabilidad de los pacientes más necesitados.
La falta de insumos médicos básicos, como los reactivos para el banco de sangre, pone en riesgo la vida de cientos de personas.