En la generación actual, ya sea en Estados Unidos o cualquier otro país, los niños están acostumbrados al celular y lo saben manejar mejor que una persona mayor. Esta nueva normalidad es a la que Bill Gates, citando a Jonathan Haidt en La generación ansiosa, llama una infancia basada en el teléfono. Su visión no es positiva, resaltando las consecuencias negativas de la distracción constante y la omnipresencia de las redes sociales en la vida de las personas.
Por El Tiempo
En un artículo para su portal web de Gates Notes, el magnate recomienda ese libro a los padres y educadores de niños, preadolescentes y adolescentes. Desde su perspectiva, los adolescentes pasan un promedio de seis a ocho horas por día en actividades de ocio basadas en pantallas que afectan su rendimiento y su bienestar mental. Ante esto, los adultos necesitan tomar medidas drásticas pero necesarias.
“Para la generación sobre la que escribe Haidt, esto ha coincidido con fuertes picos de ansiedad y depresión, mayores tasas de trastornos alimentarios y autolesiones, caída en picada de la autoestima y mayores sentimientos de aislamiento a pesar de una conexión más continua y a demanda que nunca”, enumeró el cofundador de Microsoft sobre las consecuencias negativas en los jóvenes.
En los niños es igual de preocupante, causando menos horas de sueño, menos lectura, poca socialización en persona, la falta de tiempo al aire libre y menos independencia. “Todo esto es preocupante, pero me preocupa especialmente el impacto en el pensamiento crítico y la concentración”, resaltó.
“Sin la capacidad de concentrarse intensamente y seguir una idea a donde sea que nos lleve, el mundo podría perderse los avances que se producen al concentrarse en algo y mantenerlo ahí, incluso cuando la dosis de dopamina de una distracción rápida está a un clic de distancia”, aseguró.
Para leer la nota completa ingrese AQUÍ