En virtud de la Ley de Servicios Digitales (DSA, por su siglas en inglés), Elon Musk y su red social Xpodrían enfrentarse a fuertes sanciones si los investigadores de la Unión Europea (UE) descubren que se manipuló el algoritmo del sitio para influir en los votantes. La DSA se adoptó en 2022 para prevenir la desinformación y otras actividades ilegales en línea.
En julio, la UE determinó que X había violado múltiples principios de la DSA al no facilitar el acceso a los datos a los investigadores, no cumplir los requisitos de transparencia publicitaria y vender el acceso a su sistema de verificación “blue check”, de forma que permitía a los estafadores hacerse pasar por celebridades y funcionarios públicos.
El jueves, Musk retransmitió en directo una conversación con Alice Weidel, líder del partido nacionalista Alternativa para Alemania (AfD), y amplificó el mensaje de la agrupación de cara a las elecciones que se celebrarán en febrero en Alemania. A medida que Musk se ha vuelto más activo políticamente, crece la preocupación de que X pueda manipular su algoritmo para aumentar la visibilidad de la entrevista y ofrecer a Weidel una ventaja injusta, lo que violaría la Ley de Servicios Digitales europea, así como la integridad de las elecciones alemanas que se aproximan.
“Si una plataforma en línea supone un riesgo sistémico para la integridad electoral y el discurso público en la UE, la DSA debería intervenir de inmediato a través de su marco de evaluación y mitigación de riesgos”, declaró a DW Eliska Pirkova, analista política del grupo de defensa de los derechos digitales Access Now.
Visibilidad e interacción:
Un estudio reciente de la Universidad de Queensland descubrió que el algoritmo X podría haber sido modificado en el verano de 2024 para impulsar los mensajes de Musk en el momento en que apoyó a Donald Trump para la presidencia de Estados Unidos. El estudio concluyó que la posibilidad de priorización algorítmica o sesgo tiene “implicaciones más amplias para entender cómo los algoritmos de las plataformas pueden dar forma al discurso público al influir en qué voces y contenidos reciben mayor visibilidad e interacción”.
Si la Unión Europea descubre que el algoritmo de X fue manipulado para impulsar contenidos respaldados por Musk, puede imponer fuertes multas a la plataforma, de hasta 6% de sus ingresos globales, e incluso bloquear el sitio en los 27 Estados miembro.
“Pueden expulsarla del mercado único europeo si sigue incumpliendo las normas”, dijo a DW Andrea Renda, que dirige la unidad de Gobernanza Global, Regulación, Innovación y Economía Digital en el Centro de Estudios Políticos Europeos. “La preocupación es que, como propietario de una plataforma, podría estar creando un canal privilegiado para la amplificación de ciertos contenidos, incluyendo el discurso del odio y la desinformación”, dijo. “Esto es lo que se supone que las plataformas no deben hacer bajo Ley de Servicios Digitales”, aseguró.