A lo largo de la historia, han existido numerosos profetas y videntes cuyas predicciones han cautivado a la humanidad. Entre los más conocidos se encuentra Nostradamus, cuyas enigmáticas profecías siguen siendo objeto de estudio y debate. Sin embargo, hay otra figura que, aunque menos mediática, ha ganado notoriedad por sus acertadas visiones: Baba Vanga, la mística búlgara que, como Nostradamus, dejó un legado de predicciones que han dejado huella en la historia.
La figura de Baba Vanga, conocida como la “Nostradamus” de los Balcanes, sigue fascinando al mundo con sus enigmáticas predicciones, a pesar de que ya no está con nosotros. Durante toda su vida, realizó una serie de pronósticos que, según algunos, habrían marcado momentos cruciales de la historia contemporánea.
Aunque muchos de sus seguidores sostienen que sus visiones se han cumplido, hay quienes se muestran escépticos ante la veracidad de sus declaraciones, cuestionando la interpretación de sus palabras. No obstante, su legado sigue vivo, y su nombre se asocia con eventos trascendentales que marcaron la historia reciente, como el terremoto de Bulgaria de 1985 o el desastre atómico de Chernóbil.
¿El fin de Europa en 2025?
Una de las predicciones más impactantes de Baba Vanga hace referencia a un supuesto juicio final que tendría lugar en 2025 para Europa. Un evento de carácter bélico y destructivo que sentencia a la población europea a desaparecer a consecuencia de las guerras. En estos momentos, esto podría hacer referencia al conflicto entre Rusia y Ucrania, o a alguna nueva guerra.
Se acabará el universo
Además, esta controvertida figura también señaló una fecha para el fin del universo, el año 5079, un concepto que, aunque suene extravagante, ha despertado la imaginación de muchos, alimentando teorías sobre el destino de la humanidad y el cosmos. Según ella, esto ocurriría justo después de que la humanidad fuese capaz de mudarse a otro sistema solar tras varios siglos de destrucción en la Tierra.
Sin embargo, como ocurre con otras profecías, la interpretación y el contexto en que se hicieron estas afirmaciones siguen siendo objeto de debate. Más allá de las fechas y los detalles específicos, las predicciones de Baba Vanga, sin base científica, continúan siendo un fenómeno cultural que atrae tanto a quienes creen en el poder de la adivinación como a quienes se muestran escépticos ante las afirmaciones de la vidente.