La drástica prohibición en Florida que modificaría el hábito de millones de personas

La drástica prohibición en Florida que modificaría el hábito de millones de personas

Un senador de Florida impulsa una drástica prohibición en Florida. Lynne Sladky – AP

 

Una nueva iniciativa en Florida podría transformar la dinámica en espacios públicos al proponer la prohibición de fumar cigarrillos y vaporizadores no solo de cannabis, sino también de tabaco en áreas compartidas. Calles, parques, escuelas, hospitales, playas, edificios gubernamentales, transportes públicos y tiendas son algunos de los sitios donde se vetaría esta actividad.

Por La Nación

El senador estatal Joe Gruters, junto con otros legisladores, presentó la propuesta con el objetivo de implementar “límites necesarios”, especialmente en caso de que la Enmienda 3, que busca legalizar la marihuana recreativa, sea aprobada en la votación que se llevará a cabo en noviembre próximo, indicó Newsweek. Según el representante republicano, la medida es una respuesta a la preocupación de evitar que Florida se convierta en un ambiente similar al de ciudades como Las Vegas o Nueva York.

En específico, la propuesta de Gruters busca que se penalice “inhalar, exhalar, quemar, llevar o poseer cualquier producto de tabaco encendido o de marihuana, incluidos cigarrillos, puros, tabaco de pipa y cualquier otro producto de tabaco encendido o de marihuana”.

Este debate podría representar un cambio profundo en los hábitos de millones de residentes y turistas Florida. Actualmente, 28 estados en EE.UU., incluido Florida, ya cuentan con leyes que no permiten fumar en restaurantes, bares y lugares de trabajo. La posible ampliación de esta prohibición a otros entornos públicos, en combinación con la legalización de la marihuana recreativa, podría reconfigurar la vida en Florida.

Opiniones divididas frente a este proyecto

El senador Gruters ha dejado claro que su apoyo a la Enmienda 3 está condicionado por la aprobación de regulaciones como la él mismo propone. Sin embargo, su propuesta ha sido blanco de críticas por parte de sectores que consideran que estas restricciones son demasiado amplias y prohibitivas. Organizaciones como “Vote No on 3? argumentan que, aunque buscan “proteger” a los ciudadanos de los efectos del consumo de tabaco y marihuana en lugares públicos, la medida no aborda problemas como la posibilidad de fumar en espacios privados dentro de condominios y apartamentos.

A pesar de los esfuerzos por implementar regulaciones antes de la posible legalización, el destino de la enmienda tres dependerá del apoyo ciudadano. Se estima que la medida requiere al menos un 60% de aprobación en noviembre para convertirse en ley. Sin embargo, un reciente sondeo de la Universidad Atlántica de Florida sitúa el apoyo en torno al 56%, lo que deja en duda su viabilidad.

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