¿Piensa ir a Estados Unidos en su próximo viaje, pero no sabe cuándo es el mejor momento para emprender esta aventura y que se ajuste a su bolsillo? No se preocupe, visitar el territorio norteamericano sí es posible con un presupuesto menos elevado del que muchos imaginan; sin embargo, es importante tener en cuenta algunos aspectos clave.
Por Semana
En primer lugar, es fundamental pensar en los lugares que se tiene previsto visitar, ya que de esto depende cuál es la mejor época para viajar, teniendo en cuenta que de este a oeste, Estados Unidos tiene una extensión de 2.680 kilómetros. Por lo tanto, en todo el territorio existen cinco regiones climáticas distintas, explica Booking.com, una de las plataformas de viajes más grandes del mundo.
No obstante, en caso de no tener ninguna preferencia, por lo general, la mejor temporada para ir a Estados Unidos, con la posibilidad de encontrar precios más asequibles, es primavera y otoño.
La primera opción, en primavera, inicia a finales de marzo y va a finales de mayo, mientras que otoño va de finales de septiembre a finales de octubre, épocas en las que las temperaturas suelen ser más suaves y hay menos flujo de turistas en destinos populares, lo que podría ser el plan perfecto para aquellos que evitan las aglomeraciones.
Adicionalmente, durante estos meses, los fríos y calores extremos de ciudades como Nueva York, Washington o Boston están un poco más calmados, lo que hace posible explorar el territorio norteamericano con mucha más tranquilidad.
Una vez se elijan los destinos para visitar y se programe el viaje para las fechas que cubre la temporada baja en Estados Unidos, el tercer aspecto que los viajeros deben tener en cuenta a la hora de organizar su nueva aventura es la aerolínea en la que se planea adquirir los boletos de avión. Su precio puede variar según la compañía, el lugar de partida y, por supuesto, la época en la que se apartan.
Por esta razón, se recomienda contar con el tiempo necesario para revisar las diferentes opciones y, de esta manera, reservar el vuelo con anterioridad para evitar contratiempos y tener la posibilidad de escoger esa opción que más se ajusta a su presupuesto.
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