Con motivo de la celebración de los 414 años de Santo Cristo de La Grita, monseñor Mario Moronta, obispo de la Diócesis de San Cristóbal en el estado Táchira, en la homilía en honor al Cristo Sereno envió un mensaje a los venezolanos a propósito de los hechos que se han registrado en Venezuela tras las elecciones del pasado 28 de julio.
Luz Dary Depablos / Corresponsalía lapatilla.1eye.us
“Un verdadero católico no persigue a sus hermanos por que piensen de manera diversa”, palabras que fueron interrumpidas por fuertes aplausos de los peregrinos durante varios segundos.
“Inventando narrativas que no se corresponden a la realidad, muchos de los jóvenes que han sido puestos presos no son terroristas”, dijo monseñor Moronta.
Igualmente, se preguntó: “¿No es el momento de que en vez de inventar falsos positivos y promover persecuciones que ponen en vilo la vida y el futuro de los jóvenes, nos comprometamos a construir juntos con ellos el futuro que anhelamos? ¿No es el momento de pensar en la refundación de Venezuela?”.
“¿Por qué no se persiguen a los irregulares que invaden nuestros campos? ¿Por qué no se persigue a los mafiosos que esclavizan a tantos adolescentes, hombres y mujeres con el narcotráfico y la trata de personas?”, continuó el obispo.
Reiteró que el protagonista y el dueño de la democracia es el pueblo. “Nadie es dueño de la democracia, ni los del Gobierno ni los de la oposición. Somos colaboradores y servidores de la misma”, manifestó.
“Ser misericordiosos, limpios de corazón, tener hambre de justicia, ser constructores de la paz, estos sentimientos nos hacen felices. El ser perseguidos por la justicia, y hoy lamentablemente, sobre todo entre los jóvenes, hay muchos que son perseguidos por defender sus derechos e implementar la justicia”.
También envió un mensaje a esas madres que en estos momentos lloran y claman justicia por esos hijos que fueron detenidos de manera arbitraria y por quienes también han sido asesinados, solo por salir a exigir justicia.
“Que sepan que estamos haciendo lo posible e imposible para que sean liberados y para que sean respetados sus derechos, y a los que lamentablemente tanto de un lado como de otro han fallecido, que cuenten con nuestra oración y nuestro consuelo”, dijo.
“Ya basta de que por que uno piensa diverso, lo ofenden a uno. Ya basta de que a nosotros nos puedan aplicar la Ley contra el odio, pero no se la aplica a quienes diariamente hablan mal de todos nosotros, incluso hablan mal de su pueblo. La ley es igual para todos”, acotó Moronta.
Expresó que para lograr la paz en Venezuela, se debe “escuchar al pueblo porque ha sido liberado por el señor Jesús (… ) Escucharlo en sus clamores, en el respeto de sus anhelos, decisiones y esperanzas”.