Aparecen en Lara casos de kwashiorkor, una enfermedad infantil propia del continente africano

Aparecen en Lara casos de kwashiorkor, una enfermedad infantil propia del continente africano

Aparecen en Lara casos de kwashiorkor, una enfermedad infantil propia del continente africano

 

 

 





La crisis económica que ha atravesado Venezuela en los últimos diez años ha sido una de las principales causas del aumento en el índice de desnutrición y malnutrición en el país, representado un grave problema de salud pública del cual no se tienen estadísticas oficiales por parte del Estado.

Yanitza Martínez // Corresponsalía lapatilla.1eye.us

Las cifras a nivel del estado Lara son alarmantes y es que en el sector de salud público de esta entidad, ocho de cada diez pacientes que son atendidos en los servicios de nutrición, presentan déficit nutricional, y en su mayoría son niños y adultos mayores.

Para la licenciada Evelis Carrasco, las actuales condiciones de vida de los larenses han influido en el incremento de casos de desnutrición aguda y crónica, agregando que ya en esta entidad hay casos de kwashiorkor, que solo estaban presentes en el continente africano.

El kwashiorkor es una enfermedad en los niños causada por la ausencia de nutrientes, como las proteínas. Se caracteriza por abombamiento abdominal, despigmentación de la piel y coloración rojiza del cabello.

Para la profesional en nutrición resulta preocupante que la ingesta proteica sea tan pobre, y es que la mayoría de las personas no tienen recursos para cubrir una dieta rica en proteínas y de alto valor biológico.

Comenta que en las consultas privadas realizan al paciente la debida valoración y le diseñan los planes de alimentación, pero esas indicaciones quedan en letra muerta, pues no todos tienen las posibilidades de cubrirlo, tomando en cuenta que al plan alimenticio se le agrega una suplementación nutricional para que así sea más efectivo.

Obesidad no es sinónimo de buena nutrición

La harina de maíz precocido, el arroz y la pasta, son los alimentos de mayor consumo en el estado Lara. Alguien puede verse visiblemente gordo, pero resulta que son personas que siguen dietas hipercalóricas, debido al alto consumo de carbohidratos, que en algunos casos son alimentos que tienden a inflamar al organismo.

Al respecto, explica la nutricionista que existe una falsa creencia de que el carbohidrato es dañino, lo que no es así puesto que ellos son fuente de energía. Lo perjudicial es combinarlos entre sí.

La falta de recursos ha obligado a las personas a consumir arepa con arroz, pasta con arepa o arroz con granos, estos últimos son proteínas, pero de bajo valor.

Es decir, las complicaciones vienen por el exceso de carbohidratos, los malos hábitos, la combinación de carbohidratos, sumado al consumo de refrescos o bebidas gasificadas.

Una persona puede que a nivel visual se vea bien, pero tras las evaluaciones se pueden determinar algunas señales negativas y las implicaciones que esto acarrea como diabetes, resistencia a la insulina, hipertensión y patologías cardiovasculares.

Población infantil, la más afectada

En la región larense, la tasa de embarazos va en ascenso y esa situación trae consigo problemas de desnutrición.
Es necesario mencionar que las poblaciones rurales y con poco poder adquisitivo son las más vulnerables, generando problemas de desnutrición en el embarazo que, a su vez, trae complicaciones en los niños.

En los centros de salud pública de Lara, la mayoría de los pacientes con desnutrición son niños, mayormente de 0 a 1 año de edad.

Estos casos, según comentó una fuente ligada al Hospital Central Universitario Antonio María Pineda de Barquisimeto, quien prefirió no revelar su identidad, los abordajes van desde la madre, a los fines de que pueda garantizar una lactancia materna exclusiva, y a los niños les suministran fórmulas maternizadas, pero no todo el tiempo hay existencia de las mismas o estas no alcanzan para cubrir toda la demanda, por lo que deben adquirirla las mismas madres, y estas van desde los 15 dólares en adelante, dependiendo de la marca.

En este sentido, la licenciada Evelis Carrasco manifestó que en este tipo de casos influye que son viviendas multifamiliares, que tienen más de cinco miembros y, por ende, no tienen para sostener una alimentación balanceada, razón por la cual deben hacerle seguimiento a todo el grupo familiar.

Comentó que parte de los síntomas que presentan estos niños son pelo fino, abdomen globoso y miembros superiores e inferiores edematizados.

Abandono de las zonas rurales

La falta de atención gubernamental y los pocos recursos enviados por parte del Estado en materia de salud han jugado en contra de la población rural de Lara, donde se registran un gran número de casos de desnutrición.

Torres y Urdaneta son los municipios con un alto índice en desnutrición, donde solo reciben ciertas ayudas por partes de instituciones benéficas y ONG.
Un ejemplo es Cáritas, que a través de sus diferentes programas de la mano con la Unicef, están haciendo un trabajo importante en todo el estado Lara con la atención a través de fórmulas y suplementos.

También es necesario mencionar que los nutricionistas del sector privado, en algunos casos toman la decisión personal de ayudar, y a través de familiares y amigos, logran prestar la colaboración en el abordaje, seguimiento y atención, la cual puede durar años.

Lamentablemente, quienes tengan cero posibilidades económicas quedan “a la buena de Dios” y la ayuda que puedan prestar las ONG, fundaciones y organizaciones de la sociedad civil.

Bolsa Clap, “una bomba de carbohidratos”

Harina de maíz amarillo, arroz, pasta, granos, sardinas, chicha y azúcar, son los rubros que traen las bolsas de los Clap en Lara. Estas tienen un costo aproximado de 50 bolívares y son expendidas una vez al mes.

La realidad en la región a nivel alimenticio es que muchos ciudadanos dependen únicamente de esta bolsa para comer. Esta, además de no aportar los nutrientes necesarios para mantener las funciones del cuerpo, contienen alimentos de muy baja calidad.

En promedio, una familia de cinco miembros que no tenga otro insumo para alimentarse, la bolsa Clap puede que rinda para 10 a 15 días aproximadamente. De allí se deriva que en estos núcleos familiares se presenten casos de desnutrición, ya que el consumo de proteína es muy bajo.

Considera la nutricionista Carrasco que la alimentación tiene que ser variada y balanceada, y debe incluir vegetales, frutas y verduras, que aportan las vitaminas y minerales para el funcionamiento del organismo.
Expresó que con una dieta a base de carbohidratos es muy difícil que se puedan evitar los cuadros de desnutrición.

Adultos mayores se llevan la peor parte

Es muy poco lo que un pensionado o jubilado puede hacer con 130 bolívares al mes en un país donde, según el Centro de Documentación y Análisis Social (Cendas), la canasta alimentaria se ubica en 587.78 dólares (mes de junio).

La población adulto mayor de la entidad larense carece de atención familiar, amor y afecto, por lo que estas personas entran en un estado de abandono que los lleva a atravesar por cuadros de desnutrición, en su mayoría crónicos.

Para sobrellevar esta situación, en Lara existen más de un centenar de comedores populares, muchos de ellos gestionados por la Iglesia Católica, que se encargan de palear las deficiencias alimentarias de los ancianos.

Migración sigue dejando consecuencias

Muchos son los problemas que ha dejado el éxodo masivo de venezolanos. La estampida de coterráneos que han tenido que dejar a sus hijos al cuido de sus abuelos también ha dejado problemas en la nutrición de los niños larenses.

Tal es el caso de Julio Hernández y Cecilia de Hernández, quienes residen en el barrio Los Colerientos de Barquisimeto. Estos abuelos quedaron a cargo de sus tres nietos luego de que su hija emigrara a Colombia.

El triste relato de esta familia no es más que el rostro visible de lo que la crisis económica ha dejado en todos los sectores de Venezuela.
De esta familia se pudo conocer que reciben 250 dólares al mes por parte de la mamá de los niños, monto que deben estirar para poder garantizar el sustento a los niños.

Comenta la señora Cecilia que es poca la proteína animal que logran adquirir debido a los altos costos, por lo que tratan de bandearse con granos, huevos y carbohidratos, detallando que más de ahí no pueden comprar, ya que aparte de eso está el tema de la salud y la educación.

Señaló que, aunque reciben la bolsa Clap, es algo que no pasa de durarles 15 días y la mayoría de las veces los alimentos son de mala calidad.