Más de una semana ha transcurrido desde que Nicolás Maduro inauguró el Acueducto La Mulata en el municipio Pedro María Ureña, infraestructura que supuestamente mejoraría la grave crisis de agua que padecen los pobladores de varias comunidades en la frontera del Táchira, donde la mala administración en la sectorización sigue afectando a quienes habitan principalmente en las comunidades de Aguas Calientes.
Luz Dary Depablos / Corresponsalía lapatilla.1eye.us
Los pobladores de la frontera habían despertado la esperanza de volver a recibir agua por tubería en cada uno de sus hogares con la activación del acueducto de La Mulata, pero tras varios meses y hasta años (en algunos sectores) sin recibir el servicio, nuevamente se sienten engañados, ya que de nada sirvió que el mismo presidente de Hidrosuroeste, Arquímedes Uzcátegui, en compañía de Nicolás Maduro, realizaran una inauguración que hasta la fecha en nada ha beneficiado a la frontera del Táchira.
Hermes Yuncoza, líder de calle en Ureña, lamentó lo que está ocurriendo con el servicio de agua en Ureña. “Ahora tenemos dos acueductos: el Acueducto de La Mulata, que fue inaugurado por nuestro presidente Nicolás Maduro, y el Acueducto Regional del Táchira, que será el encargado de suministrar el agua a la parte sur, y el de La Mulata para la parte norte, pero ahora para ninguna de las dos partes está llegando el agua. Estamos mal, mal, muy mal con esta administración de Hidrosuroeste en nuestro municipio”, expresó.
A pesar de ser seguidor de Maduro, no descarta que haya negocios turbios en la distribución del agua en la frontera. Señaló que en el barrio Las Flores desde hace bastante tiempo no cuentan con el servicio y aunque hacen la solicitud a través de la aplicación VenApp, tampoco les llega. “Estamos peor que antes. Ahora ni llueve para recoger agua y es preocupante la situación”, dijo.
Igualmente, Carlos Rivera, habitante del sector 24 de Julio, enfatizó que “tenemos un tanque de Hidrosuroeste de 500.000 litros, que desde hace tres años no lo llenan porque la persona encargada de hacer la distribución en los sectores, el valvulero conocido como Edward, no nos hace el favor de abrir las 16 válvulas que corresponde para que llegue el servicio de agua por tubería al barrio”.
Explicó que solo les distribuyen 2.000 litros cada 15 días, cantidad de agua que resulta insuficiente, sobre todo en hogares de familias numerosas. Señaló que 425 familias en su comunidad padecen esta situación, quienes se habían alegrado con la inauguración de La Mulata, pero solo se quedó en un anuncio que no se cumplió.
Rivera reiteró el llamado a Pablo Ruiz, un ingeniero de Hidrosuroeste, quien tendría pleno conocimiento sobre la situación que padecen estas comunidades, pero en lugar de dar una solución a las zonas afectadas, al parecer, siempre estaría evadiendo a los usuarios y la única respuesta ha sido “que las válvulas no son capacitadas para enviar el suministro de agua al barrio, pero en la parte baja del barrio sí llega agua por tubería con suficiente presión”, acotó.
Carlos Rivera exige una explicación sobre cuál sería el motivo por el que no llenan el tanque de 500.000 litros ubicado en la parte alta de la población de Ureña, específicamente en el barrio 5 Julio, el cual debe ser llenado por bombeo.
Insiste en que debe haber una mejor sectorización que no solo beneficie a un reducido grupo, pues la zona alta sigue siendo afectada, donde “deben mover 16 llaves para que les llegue el servicio por solo dos horas”, lo que los obliga a comprar el servicio que supera los 26 dólares y no todos cuentan con los recursos económicos para cubrir esta necesidad de manera semanal.
Por su parte, Carlos Taborta, concejal del municipio Pedro María Ureña, destacó que ha recibido denuncias de habitantes de diferentes sectores, quienes han solicitado el servicio por la aplicación VennApp y, al parecer, los mismos conductores han manifestado a los ciudadanos que la solicitud de los 2.000 litros de agua por familia deberán hacerla en 28 días, pese a que lo estaban haciendo semanalmente o cada 15 días.
Taborta insiste en que se debe cambiar el personal de Hidrosuoreste. “La mala sectorización sigue siendo el problema de fondo. Anteriormente con un solo acueducto llegaba a todas las comunidades, pero siguen siendo las mismas autoridades desde hace más de siete años, tiempo en el que en muchos barrios de Ureña desapareció el agua”, puntualizó.