El estadio Hard Rock presenta un aspecto con la capacidad desbordada en su aforo de 65.000 espectadores después de que se abrieran las puertas del recinto y accedieran, sin control, miles de aficionados que esperaron horas a las puertas del recinto para entrar a la final de la Copa América.
Los problemas en los accesos se originaron como consecuencia de una avalancha de aficionados sin boleto que entraron al estadio forzando una de las puertas y arrasando a miembros de la seguridad del estadio.
Ante el caos que hubo en las entradas al recinto, estos estuvieron cerrados durante más de una hora, hasta que la seguridad del estadio se hizo con el control de la situación. La Conmebol decidió que la final se postergase media hora, porque el estadio presentaba menos de media entrada a un cuarto de hora del inicio del partido.
Se abrieron entonces todas las puertas, sin que hubiese ningún tipo de control, y miles de hinchas han podido entrar al estadio y copan los pasillos y las zonas de evacuación del Hard Rock. EFE