“Íbamos de regreso (a Colón), después de Lobatera en la camioneta de la hermana de él (alcalde Yonnhy Liscano), ella iba manejando y de repente nos empiezan a perseguir. Empezamos a correr porque pensábamos que nos iban a robar. Más adelante nos interceptaron. Por un momento pensamos hasta en un secuestro, porque eran hombres encapuchados vestidos de negro con armas largas”, contó Lisset Rondón, esposa del alcalde del municipio Ayacucho del estado Táchira, Yonnhy Liscano.
Por Luz Dary Depablos / Corresponsalía lapatilla.1eye.us
Tras detenerse la camioneta, los hombres solicitaron que bajaran el vidrio, y seguidamente dijeron: “Yonnhy Liscano, usted está detenido”. De inmediato le ordenaron que se montara en una unidad con supuestos funcionarios de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim), mientras varias mujeres subieron a la camioneta donde se desplazaba la hermana y la esposa de Liscano. Continuaron en caravana el recorrido hasta la sede de la División Contra la Delincuencia Organizada (DCDO), donde funcionaba anteriormente la sede de las Fuerzas de Acciones Especiales (Faes).
Al llegar a la sede del DCDO, ubicada en el sector La Machirí, al final de la avenida Los Agustinos de San Cristóbal, la esposa y la hermana del alcalde fueron requisadas por las féminas, las despojaron de sus teléfonos. Estuvieron allí durante toda la noche, específicamente en un container donde había un sofá y aire acondicionado, mientras Yonnhy Liscano pasó la noche en otro container y perdieron toda comunicación, narró Rondó al equipo de lapatilla.1eye.us.
Al amanecer, notificaron a la esposa y hermana de Liscano que podían retirarse, pero sin el vehículo, pues el mismo (una camioneta Merú), pese a ser propiedad de la hermana, quedó detenida como parte “de la investigación”.
“Lloramos toda la noche, teníamos mucho frío, de paso llovió. Les insistí (a los efectivos que estaban en el lugar) que mi esposo no es un delincuente, y ellos dijeron que lo tratarían como un alcalde, que estaría bien. Les dije que si podía llevarle comida y me dijeron que no, porque ahí tienen comedor. No sé más nada de él”, enfatizó.
Yonnhy Liscano, de 44 años de edad, es militante de Acción Democrática, y al parecer será presentado mañana viernes ante la Fiscalía Séptima.
Otros alcaldes en la mira
En medio de la tensión que enfrentan actualmente varios alcaldes de la zona norte del estado Táchira, debido a que algunos medios y cuentas regionales del chavismo publicaron una lista de alcaldes opositores quienes supuestamente tendrían “orden de aprehensión”, el alcalde Panamericano, Yonathan Rangel, se pronunció desligándose de supuestos hechos de violencia en su municipio.
“Nosotros llamamos a la paz. Para este 28 de julio, hay que salir a ejercer su derecho, pero en sana paz, no queremos que haya violencia en el municipio Panamericano. Como primera autoridad tengo que velar por todo el municipio, por todos los ciudadanos y no dejar que suceda algo fuera de lo normal y de lo legal en cualquier situación”, aclaró el alcalde de Panamericano.
“Aquí está todo el equipo, aquí hay diversidad de pensamiento, en ningún momento hemos dicho al personal de nuestra institución o de nuestro equipo que está afuera, que obligatoriamente tiene que votar por la tendencia que diga Yonathan Rangel, es totalmente falso. Aquí a nadie se amedrenta, si no piensa igual que nosotros, somos lo contrario a lo que quieren imponernos, a lo que quieren decir”, acotó.
Por otra parte, se conoció de manera extraoficial que Rigoberto Ovallos, alcalde de Antonio Rómulo Costa de la zona norte de Táchira, también tendría una “orden de captura”. El mandatario local fue alertado, por lo que estaría “prófugo”, según algunos medios regionales.
Cabe destacar que los alcaldes que estarían siendo señalados de ser supuestamente investigados, hace algunos días sostuvieron un encuentro en la ciudad de Caracas con el candidato presidencial, Edmundo González. En los próximos días se tiene prevista la visita de la líder opositora María Corina Machado a varios municipios de la entidad andina.