El Ejército colombiano mató este jueves en operaciones militares a 15 disidentes de las FARC, mientras que otros 12 resultaron heridos en el convulso departamento del Cauca, en el suroeste de Colombia, en el marco de la ofensiva que las fuerzas militares realizan contra el Estado Mayor Central (EMC), principal disidencia de las FARC.
Las operaciones, que siguen en desarrollo según la institución castrense, tuvieron lugar en el corregimiento de El Plateado, en el municipio de Argelia, uno de los territorios más disputados del suroeste del país.
Precisamente en El Plateado explotó una moto bomba el miércoles que no dejó heridos, pero sí daños materiales, y es una de las principales zonas rojas en la ofensiva que desde hace unas semanas -desde que el Gobierno suspendiera el cese al fuego con el EMC- se desarrolla en el Cauca.
El Gobierno colombiano y el EMC están inmersos en un proceso de negociación de la paz que quedó en dudas después de que se confirmara que esta disidencia se había fragmentado en dos cuando su dirigente ‘Iván Mordisco’ se posicionó con las estructuras del Cauca, donde más inconvenientes al diálogo han surgido.
Actualmente el Gobierno considera que existen dos grupos dentro del EMC, los más beligerantes con los que ha roto el cese al fuego y ya no negocia, y los frente del Magdalena Medio y Catatumbo y los del sur del país, con los que sigue queriendo estar sentado en la mesa.
Junto a estas tensiones las fuerzas militares han incrementado las operaciones y la ofensiva contra la guerrilla, especialmente tras la suspensión del cese el fuego bilateral que Gobierno y EMC en tres departamentos, después de que la disidencia asesinara a una lideresa indígena e hiriese a otros dos en el Cauca.
Ya en noviembre del año pasado, El Plateado supuso un punto de inflexión en el diálogo, que se llegó a suspender después de que la comunidad retuviera a un pelotón de 200 soldados, aunque posteriormente las delegaciones consiguieron limar asperezas y celebrar un par de ciclos de diálogo más.
EFE