Varias explosiones causadas por drones rusos estallaron a apenas 150 metros de los vehículos que transportaban al presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, y al primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, en Odesa.
Minutos antes de reunirse, los mandatarios lograron escapar ilesos, según la televisión SKAI. El convoy griego se desvió siguiendo instrucciones ucranianas.
La visita relámpago de Mitsotakis no había sido anunciada y buscaba apoyar a Zelensky. Mientras sonaban las sirenas, se activó la defensa contra misiles durante su encuentro.
Fuentes gubernamentales helenas confirmaron que la delegación se halla en buen estado. La ciudad portuaria ya sufrió otro ataque el sábado.
Con este atentado durante un viaje sorpresa, Rusia buscó dañar a los líderes de Ucrania y Grecia. Pero el acercamiento entre ambos países continúa fortaleciéndose a pesar de la ofensiva bélica.
Con información de EFE