Es la única mujer en la mesa. Lleva puesta una franela roja, con el escrito: “Josué Tremaria estamos contigo”. Ella es Norialvis Guerra, esposa de Tremaria, un dirigente sindical del estado Bolívar, que tiene 7 meses detenido en Caracas.
Por Pableysa Ostos/Corresponsalía lapatilla.1eye.us
Relató que ha estado viajando a Caracas desde el momento que le permitieron la primera visita, que fue 26 días después de estar detenido. “En todo este tiempo he estado viajando a Caracas. De hecho, casi la única persona que ha ido soy yo, y su mamá una sola vez”. Tremaria es padre de tres niñas, a quienes no ve desde el 7 de julio de 2023.
Ese día salió de su casa a eso de las 7:00 de la noche con destino a la cancha de Dalla Costa en San Félix, para asistir a un torneo de fútbol sala en la que se disputaba la copa del Frente Unido de Trabajadores Socialistas (Futseb).
Tras estar unas 3 horas en el lugar, se despidió de todos los presentes para trasladarse nuevamente a su residencia, pero nunca llegó. En el trayecto a su casa fue interceptado presuntamente por funcionarios de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim), quienes lo detuvieron.
“Todos los sábados se le permitía su visita, yo lo veía todos los sábados de 8:00 de la mañana a 2:00 de la tarde. Y ya hace como un mes, la visita se redujo a 3 horas nada más: de 12:00 del mediodía a 3:00 de la tarde. Pero en todo ese tiempo, sí lo visitaba. Los lunes le llevaba su paquetería, es decir, su comida, y todo el proceso que creo yo que implica eso, porque realmente es la primera vez que estoy en una situación así”, explicó Guerra.
Pero el “sistema” que ya conocía y al que estaba “adaptada”, cambió a partir del 19 de febrero cuando le notificaron que su esposo había sido trasladado de la sede de la Dgcim, ubicada en la calle Vargas, en Boleíta en Caracas, al Internado Judicial de El Rodeo, en Guatire, estado Miranda, es decir, a unos 40 kilómetros de su centro anterior.
“Me notificaron el lunes 19 de febrero, que el 24 de febrero me toca la primera visita en El Rodeo. Sin embargo, todavía yo no tengo comunicación con él; él no se ha comunicado conmigo, no le han permitido una llamada. No sé en qué condiciones está, no puedo decir que buenas o malas, porque no tengo comunicación, no he tenido comunicación con él desde el 17 de febrero. A él le correspondía una llamada el día lunes, la cual no la hizo obviamente, porque ya estaría trasladado o no sé a qué hora fue el traslado, pero notificaron que fue trasladado ese día”, denunció la esposa de Tremaria.
Sumó que el gasto ha sido grande, ya que cada fin de semana viaja hasta la capital para visitar a su esposo. Gastos que no solo son el traslado, sino también comidas, medicinas, ropas, entre otras cosas.
“Estamos preocupados porque desde el 19 de octubre que se le hizo la preliminar, lo mandan a juicio, y todavía no nos han dado fecha ni han hecho la apertura a juicio. Entonces, él mismo me decía en la visita, ¿por qué? ¿Qué pasa en el estado de Bolívar? ¿Por qué no hay una respuesta como tal a su caso? Y yo, bueno, venía a hablar con el abogado, que no hay respuesta”, recalcó Guerra.
Piden revisar el caso
Por su parte, Asdrúbal López, secretario general de Futseb, dijo que han solicitado a través de todas las instancias revisar a profundidad el caso de Tremaria.
“Las imputaciones que hoy rezan en su contra, de acuerdo a sus abogados, de acuerdo a todos los que llevan ese expediente, no hay una prueba que sustente para que lo mantengan detenido. Pensábamos que podían más bien comenzar a retroceder ante lo que se le acusa, pero ahora vemos que trasciende a una situación más grave”.
López durante sus declaraciones aseveró que siguen respaldando al gobierno de Nicolás Maduro, a pesar de la detención del presidente del sindicato y la falta de respuestas para ingresar a trabajadores registrados en el sindicato a obras que están en las empresas básicas.
Ante la pregunta de por qué siguen respaldando a un gobierno que detuvo al presidente del sindicatos y que no da respuestas sobre sus requerimientos laborales, López respondió: “Nosotros manifestamos de verdad, de manera firme, nuestro respaldo a nuestro gobierno al proceso socialista que estamos construyendo, porque entendemos que nuestro país ha sido acechado. Nuestro país y su economía la han golpeado, nuestro país ha sido asaltado por el imperialismo y eso ha conllevado, sin duda, a afectar a nuestra sociedad, nosotros estamos claros y analizando esa situación”.
Y continúa su reflexión el sindicalista socialista: “Por eso nosotros seguimos, de verdad, esperando de manera paciente a que nuestro país se enrumbe, como en este momento comienza a ocurrir porque lo que sí somos críticos es ante el cierre de la respuesta por parte de Corporación Venezolana de Guayana (CVG), por parte de nuestro Gobierno Nacional, ante la agenda del motor número 10, que es la agenda económica del sector construcción”.