Rusia invade a Ucrania y amenaza a la Europa de países integrantes de la OTAN, incluyendo a Estados Unidos. Y lo hace amenzando con tomar medidas y/o represalias contra el que respalde a Ucrania. En el medio Oriente, el grupo militante radical palestino Hamás lanzó un ataque sorpresa contra Israel el 7 de octubre del 2023, matando más de 1.400 personas, la mayoría civiles, y secuestraron a más de 230 personas.
Por su parte, Israel contra ataca ante el hecho y el mundo se divide, expresando que respalda a Israel y/o a los Palestinos, y aumentando la temperatura bélica en el planeta. Adicionalmente -y no menos inquietante- el ánimo guerrerista sube peligrosamente por la amenaza de China contra Taiwán y sus aliados (USA, Japón, Comunidad Europea y otros) por pretender su independencia.
El continente americano no escapa ante esta peligrosa y exacerbada fiebre guerrerista. No obstante que Estados Unidos de Norte América (El Imperio), con su “Doctrina Monroe” expuesta por primera vez el 2/12/1823 por el Presidente James Monroe (1817-1825), con su preciso juicio de “América para los americanos”. ¿Efecto?: logró mantener al continente más o menos protegido y en paz por muchos años, ante cualquier intención de conflicto externo, terrorista o invasivo, especialmente de naciones extrañas precisamente a nuestro continente.
¿Efecto? Si bien, como hecho irónico, la verdad histórica indica que, contrariamente a eso -y abiertamente- hoy el continente Americano ha sido violado por la planta foránea en forma descarada, la “Doctrina Monroe” descansa en paz.
Lamentablemente, el Imperio Norteamericano (EE. UU.), como “COCODRILO DORMIDO” durante un largo letargo, ha permanecido DORMIDO en los brazos de “MORFEO” (Dios griego de los sueños) desde el 1 de enero de 1959, cuando en Cuba se instala el dictador Fidel Castro, quien derrocó a otro Dictador, el ex Presidente cubano Fulgencio Batista. Y los Estados Unidos, envuelto en una adoración sumisa en favor de “PAJARITOS PREÑADOS” (Refrán venezolano), dos años más tarde (1961), se manifiesta en favor de la voluntad de una fuerza en el exilio de casi 1500 hombres, intentando desembarcar en Cuba para combatir a Fidel Castro (con la ayuda secreta de la CIA y de la Marina de Estados Unidos), garantes silenciosos de presuntos aliados, y ofreciendo respaldo ¿realmente a cambio de qué?
Lo cierto es que, en una acción deshonesta y engañosa, defraudan al voluntariado de héroes combatientes cubanos y sin respaldo alguno. Desde luego, la consecuencia no podía ser otra: abandonados a su suerte, durante la triste y lamentable invasión a Cuba en el desembarco por “Bahía de Cochinos” (Playa Girón) en una emboscada el 17 de abril de 1961, todo termina siendo lo hoy conocido: allí mueren cientos de Jóvenes cubanos tratando de rescatar a su Patria.
Además de que todo concluye en la desaparición de estudiantes, en su mayoría. El registro histórico del hecho hoy forma parte de amigos y de compañeros de venezolanos que cursaron estudios con cubanos y por la misma motivación de varios de ellos. Lamentablemente -y a partir de esa fecha- el Imperio, olvidando su “Doctrina Monroe”, a decir de historiadores antillanos, se le dio puerta franca a la entrada del comunismo ruso a Cuba, y luego a toda Latinoamérica.
¿Y en qué ha concluido todo? La historia que hoy se construye dice que a Latinoamérica, y sin restricción alguna, mientras se agita precisamente una acción de presunta “salvación social regional”, tal presunta salvación se manifiesta con la presencia conflictiva, contaminante en todo el Continente, a cargo del desplazamiento en escena de la representación de rusos, chinos, palestinos, turcos y de todo aquello que, adicionalmente, ha terminado convirtiéndose en la proliferación de nuevas fuentes de “negocios”, entre otros).
Por lo pronto, incomprensiblemente, Venezuela, catalogada en múltiples ocasiones como la Joya de la Corona Latinoamericana por ser “el más importante centro de reservas HIDRICAS y ENERGÉTICAS del mundo occidental, además de garantizado suplidor energético, se mantiene en la evaluación objetiva de su importancia regional, como un país que goza de una posición geográfica privilegiada. Y lo hace con 1.300 kilómetros de costa con franca salida al mar, frente a los Estados Unidos de Norteamérica.
¿Y qué traduce tal hecho? Sin duda alguna, para el continente americano es indispensable rescatar a Venezuela, con miras a hacer posible la pronta recuperación y el reintegro al camino democrático. ¿Con qué fin? Con el de hacer posible el inicio a una pronta escalada democrática y de paz cierta en todo el continente americano.
NOTA: En noticias de fecha reciente, el Gobierno Norteamericano anunció que “el halcón David Erikson, secretario adjunto de Defensa para el Hemisferio Occidental de Estados Unidos, se hizo cargo del caso de Venezuela, después que sucediera el fracaso estrepitoso del señor Juan González en el Acuerdo de Barbados”. ¿Y eso qué traduce?¿¿¿¿Será que dicho nombramiento implicará un cambio en la actitud y las acciones de Estados Unidos de Norteamérica????