El asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, mantuvo este sábado un encuentro en Bangkok con el canciller chino, Wang Yi, durante el cual destacó la “importancia de mantener la paz y la estabilidad a través del Estrecho de Taiwán”, además de pedir que China frene el apoyo de Irán a los hutíes.
Como informó hoy una funcionario de la Casa Blanca, China es uno de los más importantes socios comerciales de Irán y puede usar esa ventaja para influir en el apoyo que ese país le brinda a los hutíes que atacan a los barcos mercantes en el Mar Rojo.
Durante los encuentros entre ambos funcionarios trascendió que Pekín ya ha planteado la cuestión a Irán, según el funcionario, y Estados Unidos observará que tan efectivo será la invocación por parte de China.
Sullivan y Wang mantuvieron reuniones en Bangkok, donde el funcionario chino se encuentra de visita oficial desde el viernes, durante las cuales han abordado de forma constructiva asuntos globales y regionales, entre ellas la guerra de Rusia contra Ucrania, Oriente Medio, y el mar de China Meridional, así como el Estrecho de Taiwán, éste último sobre el que Washington y Pekín mantienen desavenencias.
De acuerdo a un comunicado de la Cancillería china, en la reunión Wang indicó que las recientes elecciones presidenciales en Taiwán “no pueden cambiar el hecho básico de que Taiwán es China”, al tiempo que reiteraba que la cuestión de la isla “es un asunto interno de China”.
El canciller chino pidió a Sullivan que EE.UU. “acate el principio de ‘una sola China’ y “ponga en práctica su compromiso de no apoyar la independencia de Taiwán y respaldar la reunificación pacífica de China”.
Este mes, en las elecciones en Taiwán el candidato oficialista, el vicepresidente William Lai (Lai Ching-te), considerado un “alborotador” por Pekíín, se impuso con un 40 % de los votos.
La misma semana de las elecciones, un destructor estadounidense navegó por el Estrecho de Taiwán, una maniobra que fue calificada por China como una “provocación”
El encuentro entre Sullivan y Wang se da en medio de un proceso de deshielo entre Pekín y Washington que tuvo su punto más destacado en la reunión que sostuvieron los dos presidentes, Xi Jinping y Joe Biden, en San Francisco el pasado noviembre.
La reuniones sostenidos el viernes y el sábado se enmarcan en el “esfuerzo por mantener líneas abiertas de comunicación y gestionar de manera responsable la competencia en la relación según lo instruido los líderes”, como informó hoy un comunicado de la Casa Blanca.
“Sullivan enfatizó que, aunque Estados Unidos y China compiten, ambos países deben evitar que se convierta en un conflicto o una confrontación, según la Casa Blanca.
Ambos reconocieron los recientes avances en la reanudación de la comunicación militar, los mismos que prometieron mantener, además de discutir los próximos pasos de cara a un diálogo entre Estados Unidos y China sobre Inteligencia Artificial y que podría celebrarse en la primavera.
Las dos partes se comprometieron a llevar a cabo consultas y diplomacia adicional de alto nivel en áreas clave entre los Estados Unidos y la República Popular China, lo que incluye una eventual llamada entre el presidente Biden y el presidente Xi, que podría ocurrir en la próxima primavera, según adelantó hoy la funcionaria.
La funcionaria de la Administración Biden señaló que Sullivan y Wang abordaron además la próxima puesta en marcha, posiblemente el 30 de enero, del Grupo de Trabajo Antinarcóticos entre Estados Unidos y China, para atajar el creciente problema del tráfico ilícito de estupefacientes. EFE