El panorama para los pescadores de altura para el venidero año no es nada halagador, ya que el problema del combustible en la industria pesquera está afectando la producción y las ganancias del sector en el estado Nueva Esparta.
Por Dexcy Guédez//Corresponsalía lapatilla.1eye.us
Lisandro Vásquez, representante de la flota pargo-mero de la Península de Macanao, explicó al respecto que deben pagar precios elevados por el combustible y no reciben ningún beneficio o subsidio.
Adicionó que eso ha provocado una disminución en la flota activa, ya que muchos pescadores no pueden permitirse comprar grandes cantidades de combustible, debido a la falta de pesca y los bajos precios de venta del pescado.
“Nosotros pagamos una huella a 0,20 centavos de dólar, pero además pagamos unos aranceles y unas tasas impositivas tan elevadas y no gozamos del beneficio del combustible. Para nosotros surtir los barcos, tenemos que pagar una huella a 0,20, porque pagamos el combustible a precio internacional”, destacó.
Vásquez indicó que en estos momentos la flota de pesca de altura está activa en un 70 %, recuperación que ha experimentado debido a los esfuerzos de los pescadores para salir a faenar en aguas internacionales.
Sin embargo, prevén que en enero de 2024 irá a mermar el 80 %, puesto que se les dificulta mucho desprenderse de 3.000 dólares para comprar 15.000 litros de combustible para poder salir de campaña por 4, 5, 6 y hasta 7 meses.
“Y cuando digo que se nos dificulta, es porque la pesca ha estado poca y los precios no eran aquellos precios de antes del pescado”, enfatizó Vásquez.