El sistema de petición de asilo ha cambiado desde los años 90 a la fecha, pero no es menos complicado para los inmigrantes, por lo que la figura de ‘parole’ o un perdón a la deportación podría significar un alivio, aunque temporal.
Por El Diario NY
En Nueva York se estima que más de 110,000 inmigrantes han llegado en el último año, de los cuales unos 60,000 están bajo custodia del gobierno de la ciudad, pero no tienen autorización de empleo.
El alcalde de la ciudad, Eric Adams y la gobernadora Kathy Hochul han pedido al gobierno del presidente Joe Biden que otorgue asilo a estas personas y les permita tener autorización de empleo.
Sin embargo, las reglas de asilo son complicadas, ya que permite a una persona solicitarla durante el primer año de estancia en EE.UU., pero cinco meses después puede pedir una autorización de empleo, sin que haya garantía de que se le otorgue.
La Administración Biden lanzó un programa de ‘parole’ o libertad condicional para que ciertos inmigrantes puedan permanecer en el país, pero esa protección migratoria –aunque incluye permiso laboral– tiene fecha de expiración, dependiendo el caso.
Por ello, las autoridades piden al Congreso aprobar una reforma migratoria, a fin de ofrecer una opción viable a los inmigrantes.
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