Bajo la fachada de un proyecto de reciclaje, el alcalde Brullerby Suárez del municipio Mario Briceño Iragorry, estado Aragua, está siendo acusado de llevar a cabo un presunto ecocidio en las inmediaciones del emblemático Parque Nacional Henri Pittier.
Por Corresponsalía lapatilla.1eye.us
Residentes indignados denuncian que el plan de establecer un vertedero en el sector El Paseo no es más que un atentado ambiental sin precedentes en la entidad.
El alcalde Suárez ha tratado de vender su propuesta como una iniciativa ecológica destinada a fomentar el reciclaje, pero los habitantes locales no están comprando esa idea. Consideran que esta aparente farsa de “reciclaje” esconde intenciones más oscuras que amenaza a uno de los tesoros naturales de Venezuela.
El secretario político de Vente Venezuela en Mario Briceño Iragorry, Carlos Caballero, también se pronunció en contra del plan y arremetió contra la falta de visión y recursos para llevar a cabo un proyecto de reciclaje adecuado.
Caballero subrayó que para una verdadera iniciativa de reciclaje se requeriría una inversión significativa en vehículos especializados para la recolección de diferentes tipos de desechos, así como un trabajo serio de concientización ambiental.
“Para llevar a cabo un proyecto de reciclaje se necesitaría un capital de inversión fuerte, con camiones nuevos, camiones especializados para el cartón, vidrio, plástico. Además, para ello se debió hacer un trabajo de concientización y no hay una cultura para ello, por lo que se terminará convirtiendo en un vertedero”, enfatizó Caballero.
Por otra parte, Arturo Martínez, vecino de la comunidad de El Paseo, rechazó categóricamente las intenciones del ciudadano alcalde Brullerby Suárez, al pretender convertir su comunidad en un vertedero de basura.
“No podemos aceptar que en una zona residencial haya un depósito de materia orgánica en las faldas del Henri Pittier y mucho menos cuando ni siquiera se ha presentado el proyecto, sino que simplemente lo van a ejecutar de manera atropellada, causándonos un perjuicio a todos los vecinos”, criticó.
Ante la creciente indignación y las legítimas preocupaciones ambientales, la comunidad de Mario Briceño Iragorry exige una revisión exhaustiva y un debate público transparente sobre el proyecto del vertedero impulsado por el alcalde Brullerby Suárez.