El presidente ruso, Vladímir Putin, ha informado a sus homólogos de Bielorrusia, Uzbekistán, Kazajistán y Turquía sobre la rebelión encabezada por el jefe del Grupo Wagner, Yevgueni Prigozhin.
Putin, que trabajaba en el Kremlin este sábado, ha hablado por teléfono con los mandatarios de Bielorrusia, Uzbekistán, Kazajistán, y posteriormente con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, para informar de la situación en su país.
El portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, ha confirmado que el presidente ha informado a sus interlocutores sobre la rebelión armada y el Kremlin ha indicado que Erdogan ha expresado su total apoyo a los pasos dados por la presidencia rusa.
La rebelión, que comenzó anoche y ha continuado hoy con la toma de la ciudad sureña de Rostov por parte de Prigozhin y sus hombres, ha sido prometida por Putin para ser sofocada.
El jefe de los mercenarios rusos denuncia el “caos” reinante en la guerra de Ucrania por culpa del ministro ruso de Defensa, Serguéi Shoigú, y el jefe del Estado Mayor, Valeri Guerásimov, a los que acusa de mentir sobre la situación real en el frente y de ser culpables de la muerte de “más de 100.000 soldados rusos” por su falta de liderazgo.
La comunidad internacional, desde Estados Unidos a la Unión Europea (UE) y la OTAN, observan de cerca los acontecimientos, que Ucrania interpreta como un signo hacia el colapso del régimen de Putin, y varios países han recomendado a sus ciudadanos que eviten viajar a Rusia y de ir al centro de Moscú.
Con información de EFE