La directiva del Colegio de Bioanalistas de Nueva Esparta se pronunció una vez más por los daños que ha causado la situación política, social y económica del país, a los servicios de bioanálisis, especialmente en la región insular, hasta el extremo de comprometer el ejercicio de la profesión.
Por Dexcy Guédez //Corresponsalía lapatilla.1eye.us
Carmen Figueroa, presidenta del Colegio de Bioanalistas de Nueva Esparta, enfatizó que más que celebrar, exigen la dotación de reactivos e insumos suficientes que son necesarios para el análisis de pruebas diagnósticas y así dar respuesta a las distintas patologías clínicas que padece la gente.
Conmemorando este martes 25 de abril el natalicio de Rafael Rangel, padre del Bioanálisis en Venezuela, desde la catedral de La Asunción, Figueroa lamentó que el único laboratorio clínico público que estaba funcionando y que está ubicado en el Hospital Agustín Rafael Hernández, en Juan Griego, municipio Marcano, también está cerrado por haberse dañado el equipo de química sanguínea.
En razón de eso más de la mitad de los pacientes no tienen la posibilidad de recibir un diagnóstico preciso por no contar con los recursos para acudir a los laboratorios privados.
Ese fue el balance que presentó la dirigente gremial este martes 25 de abril, al tiempo que llamaron la atención a los organismos gubernamentales por considerar que esa situación forzosa, generada por la incapacidad, inoperancia e ineficientes políticas públicas, ha dejado un desasosiego en todos los venezolanos, y en especial a los neoespartanos.
Ratificó que como profesionales enfrentan a diario la falta de reactivos e insumos, los cuales en su mayoría son importados. Lo que más llama la atención es el desinterés de los gobernantes nacionales y regionales en buscar una solución a esos servicios y así brindar atención a todos los pacientes que acuden a los centros hospitalarios solicitando un diagnóstico o respuesta a su estado de salud.
“A los pacientes lo que menos les interesa es saber qué partido es el que gobierna. Debemos recordar que la Constitución Bolivariana de Venezuela en uno de sus artículos relata el derecho fundamental que tiene cada ciudadano de tener atención de salud adecuada y gratuita que le garantice el derecho a la vida”, recordó Figueroa.
Exhortó a las autoridades del Ministerio para la Salud, del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales y del Ipasme, a rectificar, pues insisten en que están obligados a cumplir con la Constitución, con sus trabajadores y todos los ciudadanos que exigen salud.
“Los bioanalistas seguimos en pie de lucha ante el Ejecutivo Nacional y vigilantes de las respuestas para solventar las distintas situaciones que afectan el ejercicio de nuestra profesión en los diferentes roles que desempeñamos”, insistió Figueroa.