Julián Figueroa murió a sus 28 años de un infarto y fue encontrado inconsciente el 9 de abril en casa de su madre en México, informaron sus seres queridos. El joven cantante y actor —que deja atrás a su esposa Imelda Garza y su pequeño hijo José Julián— fue parte del elenco de la telenovela Mi camino es amarte y grabó múltiples temas musicales.
Muchos se preguntan a cuánto asciende la fortuna del artista y no se ha revelado una cifra exacta. Si bien es uno de los ocho hijos de Joan Sebastian, aseguran que no recibió su parte de la herencia de su padre por conflictos familiares y legales. Su padre le regaló en vida un rancho llamado Las Palmas en Cuernavaca valorado en unos 11 millones de dólares, reporta Univision. Julián tenía además regalías por sus propias canciones y las ganancias de sus proyectos actorales.
Joan Sebastian murió en el 2015 tras batallar con el cáncer y ya han muerto tres de sus hijos trágicamente: Julián, Juan Sebastián y Trigo Figueroa. Al ‘Rey del Jaripeo’ le sobreviven sus hijos José Manuel Figueroa, Juliana Figueroa, Zarelea Figueroa, Joana Marcelia Figueroa y D’Yave Figueroa.
Según reportes, la millonaria herencia de Joan Sebastian incluye 51 propiedades en Guerrero, Morelos, Jalisco y Veracruz, incluyendo ranchos, casas y terrenos. Si bien hace más de 7 años de la muerte del icónico artista, su herencia aún no ha sido repartida por conflictos entre sus hijos, ya que él no dejó un testamento, reporta Milenio.
La herencia del Poeta del Pueblo incluye también regalías y contratos con la disquera, incluyendo grabaciones musicales que dejó. Una de sus hijas, Juliana Figueroa, inició un proceso legal, argumentando que hay propiedades de su padre ocultas, que no se contaron como parte de su herencia. Julián Figueroa estuvo envuelto en los últimos años en pleitos legales con sus hermanos y aseguran que la herencia de su padre no ha sido repartida. “Yo no he recibido una sola cosa de la herencia”, dijo al programa Ventaneando.