Con la reapertura de los pasos formales por el estado Táchira para el comercio binacional entre Venezuela y Colombia, en los últimos seis meses del lado colombiano se ha logrado la formalidad en las operaciones entre ambos países, en gran parte a la exigencia del sector del comercio internacional al gobierno colombiano, sobre eliminar el paso de mercancías por los caminos ilegales.
Luz Dary Depablos // Corresponsalía lapatilla.1eye.us
Las cifras del intercambio comercial por Táchira y Norte de Santander, desde el mes de septiembre de 2022, cuando reiniciaron las operaciones por los puentes internacionales, se han incrementado significativamente, siendo Colombia el más beneficiado, pues del lado venezolano los procesos administrativos siguen siendo engorrosos.
Sandra Guzmán, representante de la Federación Colombiana de Agentes Logísticos en Comercio Internacional (Fitac) capítulo Cúcuta, informó que de las operaciones de comercio bilateral de más de 50 millones de dólares entre septiembre y febrero, “hemos movido 59 mil de toneladas de carga en 2.400 vehículos que han pasado pendularmente de exportación e importación, es decir, 620 vehículos solamente para importaciones y 1.780 para exportaciones”.
Indicó que con las primeras operaciones del mes de septiembre, Colombia exportó a Venezuela 151 toneladas en rubros que representaron más de 282.000 dólares, y Venezuela exportó a Colombia unas 314 toneladas, para un total de 215.000 dólares
Explicó que Venezuela solo ha exportado material ferroso y bobinas de aluminio (motivo por el que aumenta el peso), mientras de Colombia a Venezuela se ha exportado insumos médicos, alimentos y dulces.
Para el mes de octubre, las exportaciones de Colombia a Venezuela se incrementaron de 282.000 a 2.200.000 dólares, es decir, de 151 toneladas a 1.495 toneladas, principalmente de productos perecederos y de la canasta familiar, repunte que, a su juicio, fue porque “comenzó a crearse confianza y el intercambio comenzara a tomar forma”, acotó Sandra Guzmán.
Igualmente, enfatizó que “en noviembre y diciembre fue superior el incremento, pues en noviembre con la visita de Gustavo Petro, hubo un impacto por los diálogos vinculantes, porque se le exigió al Ministro de Industria y Turismo (cercano al sector de comercio internacional), que se debía velar para que las trochas se cerraran definitivamente”.
Aseguró que no tenía sentido “el esfuerzo que se había logrado de abrir los pasos binacionales, si el comercio informal se mantenía por los pasos irregulares”.
Balance desfavorable
Venezuela solo mostró un incremento leve en sus exportaciones a Colombia: de 215.000 dólares a 351.000 dólares, es decir, de 314 toneladas a 844 toneladas, principalmente por la activación del carbón que se exporta desde Lobatera.
El haber “apretado” los pasos irregulares en el mes de noviembre representó un aumento en las exportaciones desde Colombia hacia venezuela de 2.197.000 dólares a 8.620.000 dólares, mientras Venezuela mantuvo sus exportaciones a Colombia en 560.000 dólares.
Para el mes de diciembre de 8.620.00 de dólares, las exportaciones de Colombia a Venezuela subieron a 13.000.000 de dólares, “tema que se vio reflejado en rubros de canasta familiar, porque sigue siendo lo que más requiere y demanda Venezuela en este momento”, expresó la representante de Fitac.
Sin embargo, para el mes de enero hubo un descenso en las operaciones: de los 13.000.000 de dólares a 7.000.000 de dólares, que según Sandra Guzman, “son propias del inicio del año, acción que se asocia a las vacaciones, las Ferias y Fiestas de San Sebastián”.
Para el mes de febrero nuevamente comenzó a aumentar el intercambio, pues superó los 12.000.000 de dólares en el caso de las exportaciones de Colombia hacia Venezuela, “lo vemos normal en un crecimiento como en los meses anteriores”, dijo.
La representante del sector aduanero en la ciudad de Cúcuta manifestó que las exportaciones de Colombia a Venezuela representan unos 44 millones de dólares, “mercancías que han sido manejadas bajo la legalidad con el pago de operaciones, dinero que ahora sí está entrando al Estado colombiano, además del cumplimiento de los requisitos. De Colombia, la mercancía sale cumpliendo toda la normativa aduanera y sanitaria”.
Además, resaltó que “está de Venezuela exigirla o no exigirla. Las partidas arancelarias dicen: si el país a donde va a llegar las mercancías requiere del visto bueno del Instituto Colombiano Agropecuario (Ica), Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima), tramítelos para hacer la exportación, pero si no te lo exige, puedes hacer la exportación sin llevar esos dos vistos buenos. Entonces está de Venezuela controlar el ingreso de esos productos, que son para consumo humano, y exigirles el tema de Ica o Invima para que la mercancía que ingrese a Venezuela sea de total confianza para el consumo por los venezolanos”.
De septiembre a febrero, Colombia ha exportado a Venezuela unos 44.000.000 de dólares, mientras Venezuela solo ha exportado a Colombia 6.000.000 de dólares, es decir, Colombia ha exportado siete veces por encima de Venezuela.
Profundización de Apecol N° 28
Con la “profundización del Acuerdo Parcial Nº 028, el cual quedó bajo la decisión 1 del Acuerdo de Complementariedad de los dos países”, que según la representante de Fitac, fue radicada en la Asociación Latinoamericana de Libre Comercio (Aladi), aún se espera para que esta organización la apruebe y entre en funcionamiento, por lo que de momento los dos países seguirán con la Apecol Nº 28 que existe desde 2011, anexos que fueron firmados en el año 2012.
Sandra Guzman señaló que la profundización de la Apecol Nº 028, que se firmó con el encuentro de Gustavo Petro y Nicolás Maduro el pasado 16 de febrero en el puente internacional Atanasio Girardort, “favorece y desfavorece” las operaciones de comercio binacional.
“Hubo partidas arancelarias que no pagaban nada bajo la Apecol Nº 028 y en ese momento quedaron pagando un porcentaje”, dijo.
Además de las partidas que no quedaron en la Apecol N° 28, que no tendrán exoneración total y “quedaron grabadas, y hay también partidas arancelarias que sacaron del acuerdo y otras que ingresaron. Aún no está en vigencia, hay que esperar que la Aladi avale esta decisión bilateral que hizo Colombia y Venezuela con la firma en el puente de Tienditas”, puntualizó.
La representante del sector aduanero aspira que para el cierre del primer semestre de este año, el intercambio comercial por Táchira y Norte de Santander supere los 600.000.000 de dólares.
“Esa es la tarea que nos puso el ministro, de incrementar la formalidad, de invitar al informal a realizar los trámites formales”.
También indicó que en la ciudad de Cúcuta se han generado unos 200 nuevos empleos, además de resaltar que la ciudad ha estado más dinámica dentro de la formalidad.
“La ciudad se ha visto beneficiada con el incremento de operaciones de comercio internacional, en cuanto a restaurantes, hoteles, la venta de alimentos”, concluyó.