Un tiroteo en Monterey Park, sur de California, durante la celebración del Año Nuevo Lunar dejó 10 fallecidos mientras que el sospechoso murió “por una herida de bala autoinfligida”, dijo la policía el domingo.
Robert Luna, sheriff del condado de Los Ángeles, donde se ubica la localidad conocida como “Nuevo Chinatown”, indicó que se rastreó una camioneta que tenía aviso de búsqueda y que cuando los agentes se acercaron, escucharon un disparo dentro del vehículo.
El sospechoso sufrió una herida de bala autoinfligida y fue declarado muerto en la escena”, detalló. Fue identificado por la policía como Huu Can Tran, de 72 años.
“Puedo confirmar que no hay sospechosos pendientes”, agregó Luna, quien dijo que aún se desconoce el motivo del ataque, que también dejó 10 heridos, algunos de gravedad.
“La investigación aún está en curso. Los detectives de homicidios (…) trabajan día y noche para recopilar información adicional y determinar el motivo detrás de este incidente extremadamente trágico”, señaló.
La cacería había comenzado 12 horas antes, después de que un hombre descrito por la policía como asiático, abrió fuego en una discoteca en Monterey Park, de 60.000 habitantes en su mayoría de origen asiático.
A última hora de la mañana, la policía tenía cercada a una furgoneta blanca en Torrance, al sur de Los Ángeles y a poco más de 40 km de Monterey Park.
Imágenes aéreas mostraron a la furgoneta acorralada por vehículos blindados, mientras que una gran cantidad de patrullas se encontraban cerca, dentro de un amplio cordón policial.
El cerco culminó con uniformados fuertemente armados abordando la furgoneta tras romper la ventana del lado del pasajero con sus armas en alto.
Fotografías tomadas por la AFP en la escena muestran el cuerpo sin vida de un hombre en el asiento del conductor.
El tiroteo
La policía respondió a las llamadas de emergencia poco después de las 22H00 horas del sábado (06H00 GMT del domingo) y encontró gente saliendo de las instalaciones.
“Desafortunadamente” los paramédicos “declararon la muerte de 10 víctimas en el lugar”, dijo Luna.
Los fallecidos son cinco mujeres y cinco hombres, dijeron las autoridades sin dar nombres ni edades.
Los testigos dijeron que el sospechoso disparó en forma indiscriminada.
Wong Wei, que vive en Monterey Park, dijo a Los Angeles Times que una amiga suya había ido la discoteca y estaba en el baño cuando comenzaron los disparos.
Según relató al diario, este dueño de una marisquería cercana, tres personas entraron corriendo a su restaurante y le pidieron que cerrara la puerta con llave, pues había un hombre con un arma semiautomática y varias rondas de municiones.
El presunto pistolero fue luego a otro local bailable a poca distancia, pero fue abordado y desarmado antes de huir.
Luna rindió homenaje a dos personas en el lugar del segundo incidente. “Puedo decirles que el sospechoso entró allí, probablemente con la intención de matar a más personas, y dos valientes miembros de la comunidad decidieron que iban a entrar en acción y desarmarlo”.
“Tomaron posesión del arma y el sospechoso se dio a la fuga”, agregó.
El arma utilizada fue “una pistola de asalto semiautomática alimentada por cargador… que tenía un cargador extendido de gran capacidad”, dijo Luna.
¿Crimen de odio?
“No sabemos si esto es específicamente un crimen de odio como lo define la ley”, señaló Luna, “pero ¿quién entra a un salón de baile y dispara contra 20 personas?”
Policías y expertos seguían trabajando en el lugar de la masacre, dijo un fotógrafo de la AFP. Cerca de allí y sobre una hilera de farolillos rojos, una pancarta deseaba a los habitantes un “Feliz Año del Conejo”.
Decenas de miles de personas se habían reunido para el festival del Año Nuevo Lunar de dos días, uno de los más grandes del área. Los eventos programados para el domingo fueron cancelados tras el ataque.
“Tengo el corazón está roto por las víctimas, sus familias y la gente de mi ciudad natal”, dijo en Twitter la representante Judy Chu, exalcaldesa de Monterey Park.
Chu había estado en la escena, uniéndose a las festividades horas antes del tiroteo, cuando la multitud aún era grande. “Esto podría haber sido mucho peor”, dijo.
El presidente Joe Biden ordenó que las banderas en los edificios públicos de todo el país ondeen a media asta hasta el 26 de enero “una señal de respeto por las víctimas” del tiroteo, señaló un comunicado de la Casa Blanca.
El tiroteo de Monterey Park fue el más mortífero desde la matanza en Uvalde, Texas, que dejó 21 muertos en una escuela primaria el 24 de mayo de 2022.
De acuerdo con el sitio web Gun Violence Archive, el año pasado se produjeron en Estados Unidos 647 matanzas masivas, definidos como incidentes con cuatro o más personas baleadas o muertas, sin incluir al atacante. AFP