Más de 30.000 empleos directos e indirectos del sector de la pesca de altura en Margarita quedaron en el limbo por la eliminación y las restricciones en el suministro de gasoil.
Dexcy Guédez // Corresponsalía lapatilla.1eye.us
La estimación la presentó Gustavo Guerra, directivo de la Asociación de Pescadores de Altura Pargo-Mero (Apamar), durante una movilización que realizaron este jueves desde la entrada de Boca del Río, municipio Península de Macanao, hasta el Hotel Venetur Margarita, donde se encontraba reunida la cúpula del Psuv en Nueva Esparta.
“El motor pesquero está “parao”, y cuando me refiero a ese motor, hablo de pescaderías, cavas, salas de procesamiento y de todo un conjunto de empresas instaladas en Nueva Esparta que están en la misma situación”, subrayó Guerra.
Aunque la caravana llegó sin previo aviso a la cumbre chavista, los pescadores de altura fueron recibidos por funcionarios antimotines que no permitieron el ingreso de los periodistas hasta el antiguo hotel Margarita Hilton.
Guerrero expresó que la problemática es más grave de lo que se imaginan los integrantes de una comisión conformada por los diputados de Nueva Esparta en la Asamblea Nacional de Nicolás Maduro.
“La comisión fue conformada para que “conozcan” la situación. ¿Quiere decir que los diputados que nos representan desconocen la crisis que vive la pesca tipo pargo-mero que se practica desde hace más de 100 años?”, preguntó el directivo de Apamar.
Especificó que cada una de las más de 600 embarcaciones que conforman la flota de pesca de altura, generan alrededor de 50 trabajos entre directos e indirectos.
“Cada embarcación tiene 12 marinos y cada uno de ellos tiene, al menos, cinco bocas que mantener. Ese es nuestro principal problema, porque nos afecta la familia”, advirtió Guerra.