Funcionarios de la policía científica detuvieron este lunes a Octavio José Mujica Díaz de 62 años de edad, y a Luis Enrique Barrios Castellanos (43), ambos con prontuario policial, por su presunta participación conjunta en el homicidio de Luis Alberto Ochoa Pérez, también con registro policial, hecho ocurrido el pasado 24 de marzo de 2022 en el Caserío El Chaparral, adyacente a la Autopista General José Antonio Páez, municipio Guanare, Estado Portuguesa.
De acuerdo con el reporte, el Cicpc sigue tras la búsqueda de Nelson Gabriel Pérez González (34) y Nelson José Caña Rondón (36), ambos con antecedentes y solicitados por su autoría material en el hecho punible esclarecido. al igual que Carlos Vargas que se encuentra por aprehender.
Según la minuta los prófugos de la justicia se encuentran requeridos por los delito de HOMICIDIO INTENCIONAL CALIFICADO, SICARIATO, ASOCIACIÓN PARA DELINQUIR Y FINANCIAMIENTO AL TERRORISMO, por el Juzgado de Control N° 03 de este Circuito Judicial, según expediente N° 3SC-13.799-22 de fecha (18-09-2022).
La detención de los dos primeros se realizó en la urbanización El Placer, calle principal con manzana 16, casa N° 15.
La víctima, fue localizado por moradores del sector, quienes les informaron a las autoridades competentes del hallazgo. Asimismo, indicaron que la víctima se encontraba desprovisto de ambos globos oculares y con signos físicos evidentes de torturas.
Luego de investigaciones de campo, análisis telefónico, comparación balística, extracción y vaciado de contenido, se logró determinar qué el ciudadano Octavio Mujica, tuvo participación intelectual en el presente hecho en la modalidad de sicariato, por cuanto contrató a los demás investigados para que ultimaran a la víctima, debido a que ésta presuntamente intento irrumpir en reiteradas oportunidades a unas de sus propiedades.
Los expertos al realizar las respectivas comparaciones balística de las conchas colectadas en lugar donde se produjo el deceso de la víctima, junto a otras evidencias, dieron como resultado que tienen una misma fuente común de origen con las evidencias de los asesinatos del detective Carlos Salina y de un ciudadano de nacionalidad árabe.
Como evidencias fueron colectadas un arma de fuego marca Glock, modelo 19, calibre 9mm, serial HHU030, provista de un cargador sin balas. (SIIPOL -); un arma de fuego marca Interdinamic, modelo KG-9, serial 04078, calibre 9mm, provista de un cargador sin balas. (SIIPOL -), diez balas sin percutir calibre .38, doce balas sin percutir, calibre 9mm, tres cartuchos sin percutir, calibre 12, y documentos de propiedad varios.