Los primeros días de Carlos III como rey del Reino Unido no han estado exentos de polémica. Tanto el pasado sábado, coincidiendo con su proclamación oficial, como hace escasos días, el monarca ha tenido ya dos salidas de tono relacionadas con la firma de documentos. Este viernes, todos los ojos estaban puestos en él cuando debía firmar en el libro de visitas de la Catedral de Llandaff, en Cardiff, pero en esta ocasión el rey se ha llevado su propia pluma estilográfica para evitar percances.
Por 20minutos
El monarca ha visitado este viernes Cardiff (Gales) acompañado por su esposa, la reina consorte Camila, en la que ha sido la última etapa de su gira como nuevo soberano del Reino Unido por las cuatro naciones británicas, que ya le ha llevado a Escocia e Irlanda del Norte, además de Inglaterra.
Ambos han asistido a un servicio religioso celebrado en la catedral de esa ciudad, en donde se rindió tributo a Isabell II. Tras la misa, los reyes han plasmado su firma en el Libro de Visitas, un momento que ha quedado inmortalizado por las cámaras de televisión que se encontraban retransmitiendo en directo.
A diferencia de las dos ocasiones anteriores, el rey ha optado por firmar con su propia pluma estilográfica, que él mismo se ha sacado de la chaqueta, algo que los expertos en protocolo no han pasado por alto en las redes sociales.
“Carlos III se ha llevado su propio estilográfica a Gales y, por el momento, todo parece ir bien”, ha comentado en Twitter la asesora en comunicación no verbal Patrycia Centeno.
Carlos III se ha lleva su propio estilográfica a Gales y, por el momento, todo parece ir bien… #bodylanguage #escenografia #protocolo pic.twitter.com/wsGt5sxvi0
— Patrycia Centeno (@PoliticayModa) September 16, 2022