Las personas que recibieron un órgano están más expuestas a infecciones y otras enfermedades. En diálogo con Infobae, un experto de México detalló uno de los últimos avances científicos.
Por infobae.com
En los últimos cinco días, los máximos referentes del mundo del trasplante y la donación de órganos se reunieron en la Ciudad de Buenos Aires en el 29º Congreso de la Sociedad Internacional de Trasplantes que, por primera vez, se celebró en Latinoamérica.
Del 10 al 14 de septiembre, se desarrollaron exposiciones y mesas de debate sobre diversos temas relacionados con el trasplante y se abordaron los desafíos futuros que incluyen desde las tecnologías de última generación, los xenotrasplantes (o trasplante con órganos provenientes de animales) y las nuevas opciones terapéuticas para mejorar la calidad de vida de los pacientes trasplantados.
La cumbre de expertos fue organizada por The Transplantation Society (TTS), una organización internacional que cuenta con 6.500 miembros de 105 países. Es una sociedad médica sin fines de lucro centrada en el trasplantes de órganos, tejidos y células. Su misión principal incluye el desarrollo de la ciencia y la práctica clínica, la comunicación científica, la educación continua y la orientación sobre la práctica ética.
“El balance del congreso fue extremadamente positivo, concurrieron 3.100 participantes de 85 países – desde Mongolia a EEUU- y participaron profesionales de todas las áreas de Donación y Trasplante, además de la incorporación de estudiantes de medicina por primera vez en un evento de este tipo. Además, otro punto a destacar fue la posibilidad de incluir a todas las religiones en apoyo a la donación y el trasplante”, explicó a Infobae el doctor Gabriel Gondolesi, vicepresidente del 29º Congreso Internacional de Trasplantes y presidente de la Asociación Internacional de Rehabilitación y Trasplante Intestinal (IRTA).
Respecto a las nuevas tecnologías médicas aplicadas al trasplante y la donación de órganos, tejidos y células, el doctor Gondolesi señaló los avances y nuevos desarrollos “en áreas como xenotransplante, perfusión regional de órganos y, en particular, el uso de perfusión ex vivo para su optimización, sumado a nuevas formas no invasivas de diagnóstico e innovaciones terapéuticas”.
En cuanto a la posiblidad de trasplantar órganos o tejidos de animales de otras especies para cubrir el déficit de donantes frente a la cantidad de pacientes que esperan un trasplante, el vicepresidente del congreso sintetizó: “El campo del xenotransplante ha alcanzado ya su práctica clínica, aún incipiente pero con futuro promisorio”.
Tratamientos con anticuerpos monoclonales
Durante su estadía en Buenos Aires para participar del Congreso Internacional de Trasplante, el doctor Jesús Abraham Simón Campos, fundador e investigador principal del Instituto Köhler & Milstein Research e investigador Emérito del Hospital Agustín O’Horán, en México, dialogó en exclusiva con Infobae sobre el tratamiento con anticuerpos monoclonales que fortalece el sistema inmune de las personas trasplantadas.
El especialista mexicano en inmunología y reumatología, retrató el funcionamiento de las defensas del organismo en este grupo: “A un paciente trasplantado se le administran fármacos inmunosupresores, justamente para que su cuerpo no rechace el órgano recibido, pero esto debilita su sistema inmune. Por eso, este grupo vive una realidad muy distinta frente a la pandemia”.
Con el avance de la vacunación en todo el mundo, desde la aplicación de las primeras dosis hasta los últimos refuerzos rediseñados contra la variante Ómicron, el mundo vive una etapa de transición de la pandemia por COVID-19, la infección se ha convertido, en la mayoría de los casos, en una enfermedad leve con una baja tasa de mortalidad. Esto sucede gracias a que, por efecto de los inoculantes y/o por infección previa, la mayoría de la población mantiene niveles de inmunidad altos, por haber generado anticuerpos frente al patógeno.
Sin embargo, este escenario es muy distinto para las personas con inmunocompromiso. “Estos pacientes aún hoy siguen en riesgo, a pesar de los avances en vacunación, las estadísticas mundiales reflejan que aún estado vacunados, los pacientes trasplantados presentan una tasa de mortalidad del 30% al contagiarse de coronavirus”, indicó el doctor Simón Campos.
En el 29º Congreso de la Sociedad Internacional de Trasplantes, el experto mexicano presentó “Enfoques innovadores para la prevención y el tratamiento de COVID-19 en poblaciones de alto riesgo”, con los resultados de los estudios clínicos sobre el tratamiento con anticuerpos monoclonales. Esta investigación ya había sido adelantada en exclusiva por Infobae a fines del año pasado.
“Ómicron cambió todo, así como las vacunas disminuyeron su eficacia y hubo que aplicar refuerzos, también muchos anticuerpos monoclonales que perdieron su eficacia. Uno de los pocos que mantuvo la capacidad neutralizante frente a Ómicron fue el AZD7442, que es una combinación de anticuerpos monoclonales (tixagevimab y cilgavimab)”, detalló Simón Campos a Infobae.
En el estudio presentado en el congreso se evaluó a 5.197 personas pertenecientes a grupos con factores de riesgo (con enfermedades previas, trasplantados o inmunocomprometidos por otras causas) y a grupos muy expuestos (personal de salud). “Los resultados mostraron que el AZD7442 redujo 83% el riesgo de infección sintomática por coronavirus en estos pacientes por al menos 6 meses”, apuntó el especialista en inmunología.
Una de las ventajas de este tratamiento es su protección prolongada y su capacidad neutralizante frente al virus, Simón Campos explicó: “Los anticuerpos monoclonales suelen tener un tiempo de duración de su efecto de 28 días, por lo que para mantener su protección habría que inyectarlos una vez al mes, algo poco práctico y costoso. Sin embargo esta nueva combinación ofrece tres ventajas comparativas respecto a otros tratamientos: su vía de administración es intramuscular (por lo que puede aplicarse en un consultorio médico, el tiempo de protección mínimo es de 6 meses (puede llegar hasta 12 meses), y es eficaz contra todas las subvariantes del coronavirus”.
En cuanto el perfil de seguridad de estos anticuerpos monoclonales, no hubo casos de COVID-19 grave o muertes relacionadas con la COVID-19 en los estudios con AZD7442, ni en el análisis primario ni en el de seis meses.
Vale destacar que este tipo de terapia es preventiva (se aplican dos inyecciones cada seis meses pre exposición al virus) y aportan más protección para los pacientes cuyo sistema inmune está debilitado, pero no sustiye a las vacunas, los médicos recomiendan ambas formulaciones para fortalecer la inmunidad.