La autoridades aduaneras de Bulgaria interceptaron un cargamento de más de 100 kilos de heroína, con un valor de cinco millones de euros, escondido en un vehículo que entró en el país procedente de Turquía y se dirigía a Francia.
La incautación se realizó el pasado lunes en el punto fronterizo Kapitan Andreevo, la principal entrada a la UE de productos de Turquía y Oriente Medio, y donde el tráfico de mercancías estuvo años bajo control de grupos mafiosos.
La droga estaba distribuida en 209 paquetes escondidos en compartimentos ocultos bajo los asientos y en el maletero.
El conductor del vehículo, un ciudadano francés, fue sido detenido.
Se trata del mayor alijo decomisado en los últimos cuatro años en Bulgaria, país balcánico que forma parte de una de las principales rutas del narcotráfico desde Oriente Medio hacia Europa, informaron este miércoles a Efe fuentes policiales.
Por Kapitan Andreevo cruzan unos 900.000 camiones cada año, según los datos oficiales búlgaros.
Hasta hace pocos meses los controles de esos camiones estaban en manos de una empresa privada vinculada a la delincuencia organizada, reveló la Agencia Búlgara de Seguridad Alimentaria.
EFE