El presidente ruso, Vladímir Putin, posee varios inmuebles de lujo en la capital alemana de Berlín y en Múnich (sur), según afirma un artículo publicado este viernes por el tabloide alemán “Bild”.
De acuerdo con este medio, Putin adquirió en años recientes el “Palacio de la Ópera” de Múnich, cuyo valor se estima en 300 millones de euros, así como el edificio que alberga el Hotel Sofitel, también en la capital bávara.
El año pasado, la investigación de los documentos conocidos como Papeles de Pandora había revelado que el palacio muniqués estaba vinculado a una empresa fantasma con sede en las Islas Vírgenes.
Dicha compañía está conectada, según una investigación de varias cadenas públicas alemanas, al empresario ruso Ruslan Yevgenevich Goriujin, que a su vez está vinculado con el millonario Arkadi Rotenberg, conocido como uno de los amigos más cercanos de Putin.
De acuerdo con las informaciones publicadas hoy por “Bild”, el presidente ruso también es el propietario real de un edificio de 33 plantas en la céntrica avenida berlinesa de Kurfürstendamm, así como una villa de lujo con un terreno de 1.850 metros cuadrados al sur de la capital.
En el registro, estos inmuebles figuran como propiedad de empresas relacionadas con Arkadi Rotenberg y con su hermano Boris, ambos sometidos a sanciones en Estados Unidos y Reino Unido debido a la vinculación de sus compañías con la guerra en Ucrania.
Este mes, las autoridades alemanas inmovilizaron en un astillero de Hamburgo (norte) varios yates que presuntamente son propiedad de oligarcas rusos en la lista europea de sanciones.
Sin embargo, hasta la fecha no se han producido confiscaciones ya que en la práctica suele ser complicado determinar el propietario real de estos bienes de lujo, que por norma general están a nombre de empresas con sede en paraísos fiscales.
EFE