“Agradecemos su apoyo y sus oraciones por el pueblo ucraniano”, manifiesta el Padre Andrii Romankiv al inicio de su misa de la Iglesia Católica Ucraniana Asunción de la Santísima Virgen María en la ciudad de Miami, Florida, ante decenas de feligreses ucranianos que no pierden la fe y esperan que haya unalto al fuego en los ataques militares por parte de Rusia.
Por VOA
“Rusia continúa una guerra brutal y demoníaca contra Ucrania”, explica el sacerdote a Voz de América. “De hecho, es una guerra contra la humanidad entera, una guerra contra los derechos y valores básicos de la humanidad, una guerra contra el derecho a la vida y a la libertad, una guerra contra la dignidad humana”, prosigue.
Según datos del Centro Ucraniano de Estudios Políticos y Económicos, más de un 70% de la población en Ucrania se considera creyente. Y cerca un 67% sigue la Iglesia Ortodoxa. Se estima que entre 4 y 5 millones de personas de la población ucraniana es católica, lo que representa cerca del 9%.
Muchos se preguntan si la Iglesia puede llegar a mediar realmente en este conflicto, después de que el Papa Francisco expresara su preocupación por la escalada del conflicto. De hecho, el Sumo Pontífice se reunió con el embajador ruso en el Vaticano para trasladarle su inquietud por la invasión rusa.
Incluso se ofreció a mediar entre el conflicto para encontrar una vía de salida a esta grave situación que ha obligado a huir a más de un millón de personas, según estimaciones de las Naciones Unidas.
“La Santa Sede, que en los últimos años ha seguido de manera constante, discreta y con gran atención los acontecimientos en Ucrania, ofreciendo su disposición a facilitar el diálogo con Rusia, está siempre dispuesta a ayudar a las partes a retomar este camino”, dijo el cardenal secretario del Estado del Vaticano, Pietro Parolin.
“El Papa Francisco habla del papel de la Iglesia como institución, y estoy absolutamente de acuerdo con él, la Iglesia siempre ha hecho todo, hace todo y hará todo por el diálogo y la paz”, comenta a VOA el Sacerdote Romankiv insistiendo en el papel conciliador y unificador de la Iglesia entre la población ucraniana.
Ante el escenario que se está viviendo ahora, entiende que “el pueblo ucraniano no tiene más remedio que defenderse a sí mismo, su derecho a la vida y a la libertad, a defender su vida y su Patria Soberana e Independiente”.
“La paz auténtica en Ucrania será posible cuando los invasores rusos abandonen los territorios de la Ucrania soberana y asuman toda responsabilidad y las consecuencias de los crímenes de lesa humanidad de conformidad con los principios del derecho internacional”, subraya.
De lo contrario, advierte Romankiv, “el mundo dará luz verde para legalizar el terrorismo del más grande contra el pequeño en pleno siglo XXI”.
Entre los feligreses de esa iglesia, hay diversidad de opiniones. César López, un peruano cuya mujer es de Ucrania, asegura que “la Iglesia debió de haberse manifestado hace mucho tiempo” sobre lo que se está viviendo en Ucrania y no esperar a que estallara la guerra.
“No sé a qué están esperando los obispos y monseñores. Están metidos en sus iglesias y no están diciendo nada a Putin, no se ha formado una coalición de gente del clérigo para manifestarse en contra de Putin”, dijo López, preguntándose “dónde están los pastores, los evangelistas, los protestantes, que están viendo que hay una matazón en Ucrania”.
Luba Huertas, una ucraniana que lleva residiendo en el sur de la Florida desde hace varios años, admite estar “muy triste” porque “la historia vuelve a repetirse” en su país de origen.
Sin embargo, ella, que también acude regularmente a la Iglesia Ucraniana de Miami, sí que cree que eventualmente la Iglesia podría jugar algún tipo de papel importante, aunque por el momento no se haya tenido en cuenta para las negociaciones entre los gobiernos de Moscú y Kyiv.
“Esperamos que Dios escuche nuestra oración y que nos ayude para que Ucrania sea libre. La Iglesia puede jugar un papel importante, pero Dios dice: yo ayudo, pero primero tienen que luchar y estamos luchando. Pero solos no podemos, necesitamos ayuda”, agregaba la mujer al respecto.