Para una mujer latina y sin mucha experiencia llevar negocios en un país como China no es tarea fácil, pero sus ganas y sueños por emprender fueron más grandes; todo esto pudo lograrlo llevando como bandera la constancia y la honestidad. Gracias a esto la exitosa venezolana Giselle Bonet ha sido reconocida por la Fundación Mara de Oro Internacional como; ya que hoy en día es considerada una de las empresarias latinas con mayor éxito en el mundo.
Luego de recibirse como Administradora de empresas con una mención en Recursos Humanos del Colegio Universitario Monseñor de Talavera de Venezuela, Bonet comenzó a sentirse atraída por las inmensas oportunidades que ofrecía el país oriental. Después de tres años de empezar a importar productos ndesde Venezuela, decidió emigrar a China para así dar un cambio radical a su vida y llevar a otro nivel su desarrollo profesional.
La ciudad que la albergó fue Guangzhou en el estado de Cantón. El arranque fue difícil ya que no tenía muchos clientes; y durante toda la primera etapa en el nuevo país gastó casi todos sus ahorros para subsistir. Sin embargo, esto no la detuvo, siguió luchando ya que regresar a Venezuela no era una opción; fue allí donde la insistencia y perseverancia rindieron sus frutos.
INICIO DE UN GRAN SUEÑO
Bonet llega a vivir a China en el año 2009 para abrir su propia empresa dedicada a prestar servicios a otros importadores como búsqueda de proveedores, inspecciones de calidad de cargas, envíos aéreos y marítimos, entre otros. Su principal objetivo en la vida es ayudar a los jóvenes emprendedores a ahorrar dinero no solo a través de las compras de productos en territorio chino, sino también brindándoles estrategias, consejos y trucos para ser individuos mucho más exitosos en el ámbito empresarial y personal.
“No ha sido fácil pero a todos los que tienen un sueño de emprender les digo que crean en ellos mismos, tengan paciencia ya que cada día de trabajo es al menos un paso; que se instruyan y aprendan sobre lo que quieren lograr, ya que con mucha constancia y honestidad de seguro lograrán sus sueños, yo lo logré en China siendo mujer latina y sin mucha experiencia en ese momento”, afirmó la exitosa venezolana quien ahora también se dedica a ayudar a los hispanos que quieran iniciarse en el negocio de importar.
Actualmente, Bonet es la directora de Pinchili China, quien dirige a todo el equipo de la empresa; conformado por un grupo de profesionales chinos y latinoamericanos. Pinchili actualmente tiene su sede principal en el país asiático, y agentes comerciales en Venezuela, Argentina, Guatemala, México y Perú.
Esta empresa funciona como una agencia que facilita las relaciones de los compradores extranjeros a las fábricas Chinas y uno sus servicios se llama pago a proveedores; los emprendedores pueden pagar a las cuentas en dólares, yuanes o en monedas digitales y ellos se encargan de pagarle a los proveedores en sus cuentas en China.
Giselle quiso ir un paso más allá. Y vio en la criptomonedas un buen recurso para ampliar su negocio. Uno de mis mejores amigos es un broker financiero en Hong Kong; me habló del tema y me invitó a invertir. Como todos estoy por debajo del precio de compra, pero tengo mucha buena energía de que el mercado va a volver a subir. Por ahora invertí solamente en Bitcoin y USD comenta.
RECONOCIENDO SU TRAYECTORIA
La Fundación Mara de Oro Internacional le otorga este prestigioso galardón, con la mención Empresaria Venezolana Revelación Internacional del Año; gracias a su implacable trayectoria.
“Giselle Bonet, es una empresaria venezolana que ja logrado posicionarse al otro lado del mundo; convirtiéndose en una importante importadora de productor y enlace comercial para nuestro país, posicionándose en China como una de las mejores en su área comercial además cuenta con un gran respaldo y credibilidad a través de sus redes sociales y sitio web. Es por esto que la fundación la toma en cuenta para otorgarle este merecido reconocimiento”; afirma la Licenciada Olga Lira, Vicepresidenta Corporativa de tan respetada organización.