Maduro tiene “en ascuas” a venezolanos que esperan por reapertura definitiva de la frontera

Maduro tiene “en ascuas” a venezolanos que esperan por reapertura definitiva de la frontera

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Se espera que este viernes pudiera iniciarse el intercambio de mercancías por el puente internacional Francisco de Paula Santander (donde aún permanecen los contenedores), pero aún hay dudas. Algunos habitantes de la frontera colombo-venezolana temen que pudiese registrarse un nuevo impasse entre los gobiernos, y los contenedores que fueron removidos el pasado lunes, que continúan resguardados en la Aduana de San Antonio a pocos metros del puente, nuevamente sean instalados para bloquear el paso binacional.

Por: Corresponsalía La Patilla

Tras el retiro de los tres contenedores del puente internacional Simón Bolívar el pasado lunes, considerados por algunos funcionarios del régimen de Nicolás Maduro como “símbolos de resistencia”, los habitantes de los municipios fronterizos en Táchira se mantuvieron con muchas expectativas, que pronto se convirtieron en decepción. La frontera continúa cerrada con algunas excepciones, es decir, solo está permitido el paso para las personas que pueden usar al corredor humanitario, entiéndase pacientes crónicos (oncológicos, renales y con VIH) y estudiantes con sus representantes.

La única novedad hasta ahora es que fueron pintadas algunas líneas de señalización, colocaron alumbrado y fue lavado el pavimento del puente Simón Bolívar del lado venezolano, donde por más de cuatro años se mantuvo una completa oscuridad por falta de lámparas y un olor nauseabundo.

El primer mandatario colombiano, Iván Duque, advirtió que no se prestará para “pretensiones electoreras que puede tener la dictadura de cara a las elecciones locales que quieren adelantar en Venezuela”.

Los habitantes de la frontera asociaron estas declaraciones de Duque con los actos que ha venido protagonizando durante las últimas semanas en los puentes internacionales, Freddy Bernal, quien aspira a la gobernación de Táchira.

 

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Asimismo, el presidente de Colombia dijo en el acto protocolar de la inauguración del nuevo contingente militar en el departamento Norte de Santander, que “gracias a la presión del pueblo venezolano, gracias a la resistencia democrática y a la presión internacional, se empiezan a dar pasos de ese territorio hermano para abrir un camino que permita restablecer la frontera viva, que ha caracterizado esta región”.

Resaltó que la instalación del comando militar es necesario, porque se requiere que “en esta zona de frontera no haya connivencia, también como la que hemos visto en la dictadura en Venezuela para auspiciar el tráfico de drogas y otra criminalidad multinacional”.

Promesas incumplidas

Delcy Rodríguez anunció que sería reactivado el comercio binacional, a partir de este martes. Sin embargo, aún no han sido removidos los contenedores en el puente internacional Francisco de Paula Santander en el municipio Pedro María Ureña, por donde se espera que se dé el paso de mercancías.

La mayoría de los pobladores de San Antonio y Ureña manifestaron su desilusión. Esperaban que se reactivara el comercio internacional, con el fin de recuperar la economía que comenzó a ser golpeada con el cierre de frontera en agosto de 2015 y paralizada completamente en febrero de 2019, cuando fueron instalados los contenedores en los pasos binacionales para evitar el ingreso de la ayuda humanitaria.

 

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Algunos ciudadanos que usan con frecuencia por necesidad los pasos ilegales conocidos como trochas para poder adquirir medicamentos y alimentos, sintieron frustración al ver que se mantienen las mismas restricciones de movilidad para el paso humanitario. Ebu Fuentes, habitante del municipio Bolívar, dijo que el retiro de los contenedores fue un acto de “proselitismo político, engañando a la gente”.

Comercios en quiebra

Propietarios de los pocos locales que sobreviven en la avenida principal de San Antonio del Táchira, consideran que ya es justo la reapertura total de la frontera. Judith Hernández manifestó que en los últimos años ha sido testigo de cómo algunos vecinos han cerrado definitivamente sus negocios, que generaron centenares de empleos por muchos años. Dijo que a veces siente ganas de llorar “al ver todos los comercios cerrados”.

Hernández labora en la venta de repuestos de su familia, donde no volvieron a reponer inventario, pues solo esperan vender lo que les queda en los anaqueles. Asegura que pueden pasar hasta tres días seguidos sin lograr ni una venta.

Para el director de Migración Colombia, Juan Espinosa, la prioridad será realizar una inspección con expertos en la estructura del puente internacional Simón Bolívar, a fin de evitar algún incidente, tomando en cuenta que allí estuvieron fijos los tres contenedores por dos años y ocho meses.

Reiteró que desde el pasado mes de junio, el gobierno colombiano nuevamente abrió sus fronteras con Venezuela, tras haberla mantenido restringida solo para el canal humanitario desde que se inició la pandemia.

 

 

Informó que la única restricción que se mantiene es el terminal del documento de identidad de los venezolanos para poder ingresar a territorio colombiano. Sin embargo, del lado venezolano la frontera continúa parcialmente cerrada.

El primer vicepresidente de la Conferencia Episcopal, monseñor Mario Moronta, señaló que con el retiro de los contenedores y el levantamiento de las vallas en lado colombiano, “es un efecto de buena voluntad”. Monseñor Moronta resaltó que con la reapertura comercial en la frontera colombo venezolana, “lo que se pretende no es que sea beneficiario una corriente política, sino que sea beneficiada la gente”.

Por su parte, la gobernadora Laidy Gómez consultó con algunas autoridades colombianas sobre los últimos acontecimientos registrados en la frontera, y aseguró que tienen disposición para una reapertura gradual. Destacó que el retiro de los contenedores donde estuvo presente Freddy Bernal, se trata de un “falso positivo” y asegura que los aduaneros fueron “engañados” una vez más.