El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, llegó este viernes a Islamabad para tratar de facilitar la evacuación de más colaboradores afganos a través de Pakistán, después del control de los talibanes de Kabul.
La visita de Albares, la primera de un ministro de Exteriores español a Pakistán en 70 años de relaciones, ocurre días después del anuncio del nuevo Gobierno talibán tras su toma de Kabul el pasado 15 de agosto, que ha despertado el recelo internacional.
La inusual visita de un responsable del Gobierno español a Pakistán busca facilitar la evacuación de los afganos que colaboraron con España durante su presencia en Afganistán, después de que no pudieran hacerlo en un vuelo desde Kabul. Para ello la posible salida vía terrestre por la frontera paquistaní resultará clave.
“He tenido la oportunidad también de entrevistarme con uno de los traductores afganos de nuestro Ejército, que junto con su familia estará muy pronto en España. El objetivo de no dejar a nadie atrás continúa”, dijo Albares en la embajada española de Islamabad.
España intenta además ayudar a dar “estabilidad a Afganistán, asegurar que la población reciba ayuda humanitaria si la necesita, (…) y asegurar el respeto de los derechos humanos”, dijo el ministro en una rueda de prensa conjunta con su homólogo paquistaní.
Hasta la conclusión de las evacuaciones el 31 de agosto con el fin de la ocupación estadounidense de Afganistán, España consiguió sacar durante dos semanas a más de 2.200 personas, entre españoles y afganos, desde el aeropuerto de Kabul.
EL RECONOCIMIENTO
La situación de Afganistán se ha ido deteriorando desde que los talibanes llegaron al poder, en parte debido al cierre del flujo de las donaciones, la paralización de la economía y el bloqueo de sus fondos, por lo que el reconocimiento internacional es fundamental para este país y una población cada vez más vulnerable.
Albares, que no hizo alusión a la posición de España con respecto al reconocimiento de la victoria de los islamistas y su Gobierno, indicó que en este momento su país no busca imponer condiciones y su intervención se centra ahora en dar apoyo humanitario.
“No creo que podamos hablar de imponer condiciones, no estamos imponiendo condiciones, nadie lo ha hecho”, afirmó el ministro, que aseguró que lo que piden es libertad de movimiento para quienes han colaborado con España y quieren salir de Afganistán, permitir asistencia humanitaria y garantizar condiciones de seguridad.
En este mismo contexto, el ministro de Exteriores paquistaní, Shah Mahmood Qureshi, indicó que, con la victoria de los fundamentalistas, la realidad ha cambiado en Afganistán y “el mundo debe reconocerlo”.
“Hay una nueva realidad en Afganistán. El mundo debe reconocer esa nueva realidad y, en nuestra opinión, comprometerse con esa nueva realidad”, dijo.
Para Pakistán, que ha mantenido una posición de influencia histórica sobre los talibanes, “el mejor camino a seguir es el compromiso internacional en contraposición al aislamiento internacional”.
“El aislamiento tendrá consecuencias que no queremos. Esto no será de ayuda para Afganistán. No será de ayuda para la región ni para ustedes (España). Tenemos que adoptar un nuevo enfoque”, dijo frente a una veintena de periodistas.
LA ESTABILIDAD
Los ministros señalaron los puntos comunes que las dos naciones pueden mantener hacia Afganistán.
“Ambos queremos lo mismo: estabilidad para Afganistán, paz para Afganistán sin que repercuta la crisis en la región. Queremos que la asistencia humanitaria llegue al pueblo de Afganistán”, dijo Qureshi.
El acercamiento del Gobierno español precede a la celebración de una conferencia de ayuda internacional de la ONU en Ginebra el próximo lunes con el fin de conseguir una vía para reactivar la ayuda de los donantes y evitar lo que la organización internacional estima que sería una “inminente catástrofe humanitaria”.
“España estará presente. Involucraremos fondos, compromisos de donaciones. Nuestra agencia está dispuesta a ayudar al pueblo afgano. Llevamos 20 años muy cerca de ellos, no los vamos a abandonar. Queremos trabajar muy de cerca con Pakistán”, dijo Albares refiriéndose a la cita de Ginebra.
El ministro español se reunió esta mañana también con el jefe del Ejército de Pakistán, según dijo a Efe un funcionario de la diplomacia paquistaní, y por la tarde con el primer ministro paquistaní, Imran Khan. Esta es además la primera de una serie de visitas por países de la región, reveló Albares, sin aportar más detalles.
EFE.