El Reino Unido colaborará con los talibanes en Afganistán si llegan al gobierno y respetan los derechos humanos, afirmó el miércoles el ministro de Defensa británico, Ben Wallace.
“Cualquiera que sea el gobierno que se establezca, el gobierno británico cooperará con él, siempre que se adhiera a ciertas normas internacionales”, afirmó Wallace en una entrevista publicada por el diario The Daily Telegraph.
Pero “al igual que con otros gobiernos de todo el mundo, si se comportan de forma que socaven gravemente los derechos humanos, revisaremos nuestra relación”, añadió.
El ministro reconoció que la perspectiva de trabajar con los talibanes podría ser controvertida, ya que 457 militares británicos han muerto en Afganistán, pero “todo proceso de paz requiere un acuerdo con el enemigo”.
Las tropas extranjeras, que llevan 20 años en Afganistán como parte de una coalición liderada por Estados Unidos bajo la égida de la OTAN, iniciaron a principios de mayo una retirada que debe concluir a finales de agosto.
Los talibanes, que estuvieron en el poder entre 1996 y 2001, llevan dos meses en ofensivas contra las fuerzas afganas y se han apoderado de amplias zonas del campo. Afirman controlar el 85% de Afganistán.
Los insurgentes han tomado recientemente el control de puestos fronterizos clave con Irán, Turkmenistán y Tayikistán, así como de varios distritos de las provincias vecinas a Kabul, lo que hace temer que pronto ataquen la capital y su aeropuerto, única salida de la ciudad para los ciudadanos extranjeros.
El ministro de Defensa británico consideró que los talibanes buscan “reconocimiento internacional” para conseguir financiación y apoyo para reconstruir el país, “y eso no se hace con una capucha de terrorista”. “Deben ser un socio para la paz, de lo contrario corren el riesgo de quedar aislados”, advirtió.
Ante el estancamiento de las conversaciones oficiales en Doha, Wallace hizo un llamamiento a los talibanes y al presidente afgano Ashraf Ghani para que colaboren en la consecución de la estabilidad del país tras décadas de conflicto.
AFP