Usurpando una silla en la oficina presidencial de Miraflores, Nicolás Maduro afirmó en una entrevista con Erik Schatzker para Bloomberg Television que está dispuesto a recibir inversores internacionales en el país.
Por lapatilla.1eye.us
Maduro envió un mensaje a todos los inversores: “Ven a ver Venezuela. Ven a conocernos”, afirmó en la entrevista, pero al parecer olvidó la cantidad de empresas que han tenido que abandonar el país por las severas restricciones a las que son sometidas por el régimen que él encabeza.
El líder de la dictadura en Venezuela detalló que cuando un inversor extranjero cruce el aeropuerto “podrá ver el impacto”. Sí, el impacto que genera ver un aeropuerto internacional en ruinas con muy pocas aerolíneas prestando servicio comercial y las deplorables condiciones físicas en las que se encuentra.
Emprendedores en Venezuela
Es cierto que en tierras venezolanas existe un sinnúmero de pequeños negocios con miras hacia el futuro que prometen tener éxito si las condiciones del país se lo permiten, sin embargo, dichos emprendimientos no han sido apoyados por capital del estado: cada comerciante ha nadado en contra de la corriente para poder mantenerse a flote en una economía que cada vez se dificulta más.
Y es que no solo el emprendimiento privado se ha visto cuesta arriba, las empresas del estado que en algún momento representaron a Venezuela por sus productos, servicios, calidad y excelencia, se han visto en decadencia gracias a la poca -o nula- inversión que ha realizado el régimen en aras de mantenimiento y mejoras funcionales.
Con respeto a este tema, el aprendiz cubano resaltó en su mensaje a los inversores extranjeros que “cuando conozcas a nuestros emprendedores, verás un mundo de oportunidades”.
Venezuela de… ¿oportunidades?
Maduro insistió en que “Venezuela se va a convertir en la tierra de oportunidades de inversión, presentes y futuras” y aunque no detalló cómo planea cumplir con esta promesa detalló que “las condiciones necesarias están aquí, para que el país tenga un nuevo despegue, sobre nuevas bases, para el desarrollo y para inversión para cumplir con lo que hemos hablado: el beneficio mutuo”.
Realidad “Miraflorense”
Para el líder del régimen, su representación es “real”. “Estoy aquí porque soy real y porque expreso una fuerza. Eso es real, democrático”. Y es que claramente Maduro expresa la fuerza dictatorial de Venezuela que, aunque conoce la infinidad de razones por las que el común de la población pide su renuncia, el ego y sus ansias de poder no le permiten cumplir esta exigencia.
“Ahora que sufrimos cuatro años de una irracional y cruel campaña de ataque desde la administración de Trump
contra nosotros, vamos a curar esas heridas y que todos los que quiere conocer Venezuela, lo haga de primera mano”, pidió “por debajito” Nicolás Maduro a cada inversor internacional.
“No dejes ellos te lo cuenten; ven aquí, para que sepas la verdad de Venezuela. Con sus dificultades, pero sobre todo con su potencial”, concluyó.