La Comisión Europea (CE) anunció este viernes el mecanismo de subvención Vidas Dignas, valorado en 24 millones de euros, una nueva colaboración entre los agentes humanitarios para hacer frente a los desplazamientos forzados de refugiados.
Del importe, 12 millones irán destinados a regiones de Asia, América Latina y el África subsahariana, destacó la CE en una declaración conjunta con el alto representante, Josep Borrell, con motivo del Día Mundial del Refugiado.
En la nota, el Ejecutivo comunitario y Borrell denunciaron cómo la pandemia ha exacerbado las desigualdades existentes, lo que causa un “efecto desproporcionado” sobre los refugiados.
“La Unión Europea se compromete a poner fin a la pandemia en todas partes y a no dejar a nadie atrás”, afirmaron, en un momento en el que el 86 % de los refugiados están acogidos en países en desarrollo “que también se enfrentan a graves problemas” por la crisis.
Un compromiso que la UE aspira a garantizar a través del mecanismo COVAX, que pretende hacer viable el acceso universal a las vacunas contra la covid-19.
En estos países, señalaron, los migrantes han demostrado su “enorme potencial” para prosperar en los países de acogida.
La legislación del club de los Veintisiete garantiza el derecho fundamental al asilo, y “las personas obligadas a huir de sus hogares seguirán siendo bienvenidas en Europa”, insistieron la CE y el vicepresidente.
Así, la UE se propone satisfacer las necesidades básicas de las personas y fomentar la inclusión social mediante el acceso a la educación, la sanidad, el empleo y los medios de subsistencia.
“Tanto dentro como fuera de la UE, seguiremos prestando especial atención a los niños en entornos frágiles y vulnerables”, indicó.
La CE puntualizó que es “fundamental” superar las barreras de acceso a la educación y a actividades sociales como el deporte para los menores y evitar así que la pandemia “inflija daños duraderos a la generación venidera”.
A pesar de la pandemia, el número de refugiados y desplazados internos en el mundo siguió creciendo en 2020, alcanzando un nuevo récord de 82,4 millones, según datos publicados este viernes por la ONU.
Se trata del noveno año consecutivo de aumento, un incremento que ha hecho que a día de hoy haya más del doble de personas desplazadas de manera forzosa que hace una década, cuando la cifra estaba por debajo de los 40 millones.
A lo largo de 2020, el número de refugiados y desplazados internos creció un 4 % con respecto a los 79,5 millones que había a finales de 2019, según el informe anual de la agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), publicado en vísperas del Día Mundial del Refugiado.
EFE