El fabricante de muebles chino Hong Jinshi creó por primera vez un par de estatuas de tamaño reducido del expresidente estadounidense Donald Trump meditando en una pose budista, como un proyecto divertido para sí mismo el año pasado.
Seis meses después, el divertido pasatiempo de Hong se ha convertido en un pequeño negocio paralelo, con un taller en la ciudad de Dehua, en la provincia de Fujian, que está en camino de producir un lote inaugural de 250 estatuas de Trump vestido con túnicas budistas y con las piernas cruzadas.
Hong se inspiró en el potencial contraste que ofrecen los dos extremismos del budismo y un antiguo líder conocido por sus agudos arrebatos.
“Nuestra tradición es que una persona que es tan mayor y exitosa (…) debería comenzar a disfrutar de su vejez y estar más relajada, pero todavía estaba atormentado y preocupado por varios deseos e incertidumbres”, dijo Hong.
Hong ha recibido pedidos de China y del extranjero para 200 de las estatuas, que tardan 10 días en fabricarse y presentan un diseño que perfeccionó durante varios meses con la ayuda de un amigo escultor. Una versión de 16 centímetros cuesta 999 yuanes (152,22 dólares), mientras que una estatua de 46 cm cuesta 20.000 yuanes.
Las ventas serían mayores, dijo Hong, si no fuera por las decenas de imitaciones “falsas, copionas y de menor calidad” que han aparecido en el popular mercado en línea chino Taobao a precios más bajos.
Hong no tiene idea de si Trump ha visto las estatuas, pero dijo que estaba dispuesto a ofrecerle una al exlíder para ayudarlo a “animarse un poco”.
Hong dijo que el proyecto le ha aportado mucha felicidad y recomendó a Trump que intente una búsqueda similar de la plenitud.
“La meditación es una mirada hacia adentro, donde te dejas llevar y dejas de luchar por la fama y la fortuna”, dijo Hong. “En el estado actual de Trump, para ser honesto, está realmente bien preparado para hacer algo de meditación de esta manera”. Reuters