¿Cómo vivir la Semana Santa en pandemia?

¿Cómo vivir la Semana Santa en pandemia?

Los fieles católicos asisten a la tradicional misa al aire libre del Domingo de Ramos en la plaza Bolívar de Caracas, el 14 de abril de 2019 (Foto de YURI CORTEZ / AFP)

 

Monseñor Víctor Hugo Basabe publicó un comunicado para informar a la feligresía larense cómo se desarrollarán las actividades durante la Semana Santa. Además invitó a los fieles a cumplir desde sus hogares con una serie de jornadas para interceder, por el país, los enfermos y la familia venezolana.

Por Redacción | LA PRENSA DE LARA





1.- Viernes de concilio o viernes de dolores

Es preciso recordar, que es el último viernes de la Cuaresma de este año y que se trata de un día penitencial por excelencia. Invito a todos, teniendo muy en cuenta las condiciones de salud particulares de cada uno a realizar un medio día de ayuno y oración por la conversión de los pecadores, la propia conversión y por el cese de la pandemia del coronavirus en el mundo y particularmente en Venezuela.

El viernes de Concilio, en Venezuela se celebra la memoria de la Santísima Virgen en su advocación de Nuestra Señora de los Dolores. Propongo a todos, que siete días antes de la memoria de la Virgen se rece antes de la Eucaristía el “Septenario a la Virgen de los Dolores” con las Letanías de la Dolorosa ofreciéndolo de manera particular por las madres que han perdido a sus hijos a causa de la pandemia, de otra enfermedad o en cualquier otra circunstancia. También en solidaridad con las madres cuyos hijos han tenido que partir del país o que se encuentren en situación de prisión o cautiverio. Se hará llegar el texto del Septenario a fin que todos utilicen el mismo formato.

Siguiendo las recomendaciones de la Santa Sede y las directrices de la Conferencia Episcopal, no se deben sacar imágenes en procesión por las calles y avenidas. En los templos donde existe la Imagen de la Dolorosa, desde horas de la mañana colóquesela en las puertas del mismo a una distancia prudente, de tal manera que los fieles no se acerquen a tocarla y evitando en todo momento aglomeraciones, la intención es recordar a la feligresía los dolores de la Virgen María en el contexto de la pasión de su Hijo Jesús y su ser corredentora de la humanidad al asociar sus dolores a los del Señor. Tiene también la finalidad de recordarnos la compañía amorosa de la Virgen en este momento de dolor y angustia que vive la humanidad.

Es una buena ocasión para que en familia se medite el santo viacrucis.

2.- Domingo de ramos o domingo de la pasión del señor

Se recomienda realizar una sola celebración de bendición de ramos en espacios abiertos y en horas de la mañana guardando el distanciamiento recomendado (1,50 m.) y omitiendo la procesión previa a la celebración. El sacerdote bendiga los ramos frente al altar pero sin aspersión de agua bendita entre los fieles.

Si la celebración se realiza al interno del templo, se debe hacer con el aforo del 40% de la capacidad del mismo como hasta ahora se ha venido haciendo, observando estrictamente las medidas de bioseguridad. En este caso, la celebración se iniciará en el presbiterio utilizando la segunda fórmula que a tal efecto prevé el Misal Romano. Omítase también la aspersión con agua bendita.

En el caso que las celebraciones se realicen al interno del templo, se autoriza realizar más de una celebración considerando la limitada cantidad de personas que podrían participar en este caso, pero dejando un espacio entre una y otra celebración a fin de que los equipos de bioseguridad creados a tal efecto puedan sanitizar debidamente las instalaciones a usar.

En sus hogares, los fieles coloquen en señal de adhesión y participación en el misterio del Señor, ramos o palmas junto a la bandera de Venezuela a la entrada de sus residencias.

3.- Lunes Santo

Iniciado el domingo de ramos el camino de meditación de la Pasión del Señor hoy la devoción popular contempla a Jesús atado a la columna. En los templos donde exista esta imagen, colóquesela en la puerta principal de los mismos, con las previsiones establecidas para el viernes de concilio con la imagen de la Dolorosa. Celébrese la Eucaristía o en espacio abierto o al interno del templo con el aforo permitido y transmítase por los medios y redes de comunicación donde esto sea posible o haciendo uso de los altavoces del templo para que quienes están cerca y no puedan ingresar al templo puedan participar desde sus hogares.

Los fieles en familia, en horas de la noche reunirse y rezar el Santo Rosario teniendo como intención la salud de sus propios miembros.

4.- Martes Santo

En nuestra Iglesia de Barquisimeto, el martes santo, en horas de la mañana (9:30 a.m.) tendremos la celebración de la Misa Crismal en la Catedral Metropolitana. A esta Eucaristía sólo asistirán los presbíteros (diocesanos y religiosos), los diáconos permanentes y el Seminario Divina Pastora. Al final de la misma se distribuirá de manera totalmente gratuita los santos óleos a cada una de las parroquias dándosele preferencia en la entrega a los sacerdotes que vienen de las comunidades más lejanas. Hágase en la Eucaristía vespertina que se celebre en las comunidades parroquiales la entronización de los óleos con una adecuada catequesis sobre los mismos y siguiendo el subsidio que a tiempo se dará a conocer.

Este día, la religiosidad de nuestro pueblo se centra en la contemplación del Cristo de la Humildad y Paciencia. En las iglesias que posean esta imagen, hágase lo mismo que se propuso para el viernes de concilio con la imagen de la Dolorosa y el lunes santo con la imagen de Jesús atado a la columna. Celébrese la Eucaristía encomendando a todos los que padecen en sus hogares y en los centros de salud públicos y privados por el contagio de Covid19.

En familia, en horas de la noche, recemos el santo Rosario por el fin de la Pandemia y por la salud de todos los que padecen a causa de ella.

5.- Miércoles Santo

En este día, nuestro pueblo venezolano expresa su profunda devoción a Jesús cargando con la Cruz (Nazareno). Al igual que el año pasado, donde se posea esta imagen, se puede alistar y sacar en un vehículo por calles y avenidas principales de las comunidades, haciendo previamente saber a las familias que no se trata ni de una procesión ni de una caravana a la que deban sumarse caminando o en vehículos y ver su paso desde sus hogares y sin generar aglomeraciones.

Si es posible, provéase el vehículo mencionado o un vehículo aparte con sonido de tal manera que durante el recorrido se eleven oraciones y cánticos al Señor. En esta ocasión como de costumbre se puede meditar el santo Viacrucis. Por la tarde, colóquese la dicha imagen en la puerta del Templo y celébrese la Eucaristía, ofreciéndola por tantos hermanos nuestros que se han visto en la necesidad de migrar. Donde sea posible, transmítase a través de los medios de comunicación de los que se disponga la Eucaristía y úsense los altavoces y equipos de sonido de las parroquias.

En horas de la noche, en familia, es buena ocasión para ofrecer el santo Rosario por tantos hermanos nuestros que se han visto forzados a emigrar en búsqueda de mejores condiciones de vida o a causa de persecución política.

6.- Jueves Santo

Este día en el que recordamos la institución de la Eucaristía y el sacramento del Orden Sacerdotal (por eso se celebra el día del sacerdote). Por la tarde, la Iglesia universal celebra la Misa de la Cena del Señor con la que se da inicio al Santo Triduo de la Pascua.

Este año de nuevo se omite el gesto del lavatorio de los pies al interno de la Misa. Ofrezcamos la Eucaristía por la santificación del clero y por el aumento, fidelidad y perseverancia de las vocaciones sacerdotales en nuestra Iglesia particular, por nuestro pueblo para que sepa siempre encontrar a Jesús en la Eucaristía. Como lo prevé el ritual, se suenen las campanas durante la entonación del Gloria y donde las circunstancias lo permitan trátese de que esta Misa se transmita por los medios de comunicación de los que se disponga e invítese a los fieles a seguirla desde sus hogares y en familia en torno al altar que han preparado.

Celébrese la Eucaristía a una hora temprana de la tarde. Prepárense los monumentos que se distinguirán por su belleza pero a la vez por su sobriedad en zonas del templo en las que se puedan guardar las medidas de bioseguridad durante los turnos de adoración y cuidando se respete en todo momento el aforo permitido. Se recomienda que los turnos de adoración se realicen a más tardar hasta las 8:00 p.m.

Al finalizar la Eucaristía, desnúdense los altares como lo manda el ritual y cúbranse las imágenes también de acuerdo a lo previsto en los libros litúrgicos. Propongo a todas las familias este día, reunirse en torno al altar preparado y leyendo el Evangelio del lavatorio de los pies, lavárselos en familia, como un gesto de reconciliación ante los posibles disensos e implorando a Dios el inicio de mejores tiempos en familia marcados por la disposición al servicio y la ayuda mutuos. Luego rezar el santo Rosario por la santificación de todos los sacerdotes y por la paz de los hogares.

7.- Viernes Santo

Este día lo dedica la Iglesia a contemplar la pasión del Señor y a adorar a Jesús crucificado. También se da inicio al rezo de la Coronilla y la Novena a Jesús de la Misericordia.

Por la tarde, a las tres (3:00 p.m.) iníciese el rezo de la Coronilla y Novena a Jesús de la Misericordia pidiendo el fin de la pandemia que ahora golpea a la humanidad. Por los médicos y todo el personal de salud que están luchando contra la misma y en sufragio de las almas de las personas que han fallecido a causa del Covid19.

Terminado el ejercicio de piedad anterior, celébrese la Liturgia de la Pasión del Señor. En el momento de la Adoración de la Santa Cruz, sólo el sacerdote bese el crucifijo. Déjese un suficiente espacio de tiempo para que los fieles desde los lugares en los que se encuentren ubicados puedan de rodillas si les es posible tener un tiempo de oración. En la Oración Universal, inclúyase la oración especial por las personas afectadas por el coronavirus el año pasado por la Congregación para el Culto Divino y los Sacramentos.

Hágase todo lo posible porque esta liturgia sea transmitida a través de los medios de comunicación que se disponga. Realícese en el contexto de esta Liturgia la Colecta para los Santos Lugares.

Como ya se dejó claro, no se permiten este año las procesiones con el Cristo yacente. Invito a las familias a que en torno a las siete de la noche (7:00 p.m.) mediten unidos el Santo Viacrucis aplicándolo por todas las familias que han sufrido la pérdida de alguno de sus miembros a causa del coronavirus.

8.- Sábado Santo y Vigilia de Pascua

El sábado santo es el día en el que la Iglesia se sume en el silencio a la espera del anuncio gozoso de la Resurrección del Señor. En la mañana de este día, los templos que poseen la imagen de Jesús yacente, tal como lo han hecho en días anteriores, colóquenla a las puertas del templo junto a la imagen de la Dolorosa hasta el mediodía.

A las tres de la tarde (3:00 p.m.), hágase el segundo día de la Coronilla y Novena de Jesús de la Misericordia. Búsquese la forma de transmitir este acto piadoso por los medios de comunicación donde sea posible o usando los altavoces y equipos de sonido de los templos.

En horas de la tarde y acercándose la noche, celébrese la Vigilia de Pascua siguiendo las particulares pautas establecidas el año pasado y aún vigentes por la Congregación para el Culto Divino y los Sacramentos: “se omite el inicio de la Vigilia o Lucernario, se enciende el cirio y, omitida la procesión, se hace el pregón pascual (Exsúltet). Sigue la “Liturgia de la Palabra”. En la “Liturgia bautismal” solo se renuevan las promesas bautismales (cf. Missale Romanum, p. 371, n. 55). Posteriormente la “Liturgia eucarística”.”

En familia y en el altar dispuesto en el hogar, enciéndase una luz (velita) en señal de la Resurrección del Señor y salúdese a la Virgen María con el rezo de la Salve compartiendo su alegría por la resurrección.

Al igual que el año pasado, a las 10 de la noche en todos los templos de la arquidiócesis dotados de campañas háganse sonar las mismas por espacio de diez minutos recordando al pueblo fiel la alegría de la resurrección del señor.

9.- Domingo de Resurrección

Este día de gozo, celébrese la Misa correspondiente, siguiendo las indicaciones ya establecidas sobre lugar, aforo y medidas de bioseguridad. Trátese de que la misma sea transmitida a través de los medios de comunicación locales o haciendo uso de los recursos que la tecnología hoy nos permite donde esto sea posible.

A las tres de la tarde, hágase el tercer día de la Coronilla y Novena de Jesús de la Misericordia y así durante todos los días de la Octava de Pascua hasta su fiesta el siguiente domingo, pidiendo el fin de la pandemia que ahora golpea a la humanidad y a Venezuela por todos los médicos y personal que labora en el área de la salud y en sufragio de las almas de las personas que han fallecido a consecuencia de la misma.

Dejo pues estas orientaciones y renuevo a todos la invitación a aprovechar estos días para estar más cerca del Señor. Les pido a todos observarlas cuidadosamente y sobre todas las cosas a hacer todo lo necesario por preservar la salud y la vida en medio de este peligroso contexto de crisis sanitaria en el que nos encontramos y en el que estamos llamados a vivir y a ofrecer esperanza a nuestro pueblo en los días santos que se aproximan.