Un vecino de la región rusa de Amur, en el Lejano Oriente del país, fue operado para extraerle fragmentos de una aguja que se le incrustó accidentalmente en el corazón, informan medios locales.
“En el hospital clínico regional de Amur se ha llevado a cabo una operación única: se extrajeron dos fragmentos de una aguja del corazón de un paciente de 25 años”, reza un comunicado de la institución médica.
“El joven ingresó quejándose por dolores en el área del corazón. Según lo relatado por el paciente, quedó claro que se clavó una aguja que quedó [olvidada] por casualidad sobre una cama”, añade el texto.
Una revisación médica reveló que uno de los fragmentos ya había llegado al pericardio, es decir, el saco de doble membrana que rodea al corazón, donde se había acumulado sangre.
Los médicos estimaron que la vida del hombre estaba en riesgo y efectuaron una intervención quirúrgica de urgencia.
“Fue extremadamente complicado detectar los fragmentos de la aguja en el corazón. Sin embargo, gracias al trabajo coordinado en equipo, los doctores consiguieron su objetivo”, señalaron desde el hospital.
Precisaron, además, que el paciente fue dado de alta una semana más tarde y actualmente se encuentra fuera de peligro.