“¿La jornada es solo para quienes vayan a votar?”, preguntaba una señora entre los usuarios del Saime de La Urbina que esperaban información frente a la entrada de la institución. Algunos levantaban los brazos en señal de desconocimiento, mientras que otros le decían que podía hacer la cola aunque su intención no fuese la anunciada por el régimen de Nicolás Maduro para la activación del operativo de cedulación en pandemia.
Raylí Luján / La Patilla
Algo similar ocurría en la sede principal del Saime en la avenida Baralt, donde una fila con 50 personas aproximadamente esperaba que el director, Gustavo Vizcaíno, respondiera a cada inquietud mientras se mantenía rodeado de escoltas y funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB).
Uno de los uniformados, que se dedicaba a dispersar el aglomeramiento alrededor del funcionario le indicaba a una mujer con la copia de cédula en mano que por ser extranjera no calificaba para la jornada. “El operativo es para que puedan ir a votar. Las cédulas de extranjería no se están emitiendo”, insistía. Al ella responder que su documento le permitía votar, el efectivo castrense le pidió dirigirse a la oficina de Plaza Caracas.
Tres pisos de cola se presenciaba en esta otra sede del centro de Caracas. Uno de los funcionarios que llegó a las 6:30 de la mañana dijo que desde las 7:30 se había iniciado la atención al público, que ya superaba las 600 personas. Explicó además que a las 8 de la mañana hubo un “cierre de cola” por la gran afluencia de usuarios y negó que se hayan entregado números como lo denunciaron algunos de ellos.
Otro supuesto funcionario de la oficina en Plaza Caracas, que no portaba identificación, intentaba calmar a quienes se agitaban y gritaban que no votarían si no les permitían tramitar sus cédulas. “Tienen que calmarse, el operativo se extenderá hasta el 4 de diciembre y vamos a estar activos también en las semanas de cuarentena radical. Tienen que llegar temprano y serán organizados en la cola”, decía a quienes habían acudido con el terminal de cédula 0, 1, 2 y 3, dispuesto para hoy.
En el Saime de San Bernardino, un ciudadano dijo haber llegado a las 4 de la mañana para encontrarse con al menos 40 personas ya en la cola. Acudió porque su cédula se le había vencido y la requería vigente para ciertos trámites bancarios. Intentó buscar un gestor durante los 7 meses de inoperatividad pero le pareció costoso. De acuerdo a denuncias de usuarios en redes sociales, el cobro por tramitar una cédula a través de vías extraoficiales, rondaba los 400 dólares.
“¿Que si estoy viniendo para ir a votar? Vamos a decir que sí, aunque no se debería”, contestó el hombre, a diferencia de otras seis personas que lo seguían en la fila y dijeron que la prioridad era poder recuperar su principal documento de identidad, que en algunos de los casos, les había sido robado.
Una mujer que abandonaba la cola alrededor de las 9 de la mañana manifestó que había acudido con la esperanza de que le entregaran la prórroga de su pasaporte. Le dijeron que el único trámite disponible era el de cedulación y que debía esperar por el aviso en las redes del Saime sobre la fecha de entrega de pasaportes.
En la oficina ubicada en Parque Central, la larga fila que recorría todo un pasillo, contaba con usuarios procedentes de Coche, El Valle, Catia y Caricuao. En las sedes de sus sectores no habían recibido respuesta concreta sobre la falta de operatividad y solo fueron referidos a las oficinas anunciadas ayer por Néstor Reverol.
“Tienen que ser más consciente. Hay gente que tuvo que dormir aquí para poder sacar su cédula hoy, que venimos desde Cochecito para lograrlo, sea para votar o por cualquier otra cosa para la que necesitamos nuestra cédula”, dijo una señora en la cola.
Durante la mañana del primer día de cedulación, en otras oficinas como la de Los Ruices se registró una persona de la tercera edad desmayada mientras que en la sede de La Trinidad hubo fallas en el sistema y cortes de electricidad que retrasaron un proceso tan necesario para cualquier venezolanos, por encima del tono propagandístico que se le busque imprimir.