En medio de todas las incógnitas que rodean a la inédita campaña electoral para las elecciones de noviembre en los Estados Unidos, hay una certeza que comparten la mayoría de los analistas y los equipos de Donald Trump y Joe Biden: los latinos jugarán un papel importante en su desenlace.
Por Perfil
Con un sistema de colegio electoral en el que ganar en un estado es más importante que imponerse en el total nacional (en 2016 Hillary Clinton superó por casi tres millones de votos populares a Trump, que se impuso por el número de delegados) los resultados regionales cobran otra importancia. Pero Biden no la tiene tan fácil.
Estados en disputa. Como primera minoría, alrededor del 18 por ciento de la población y unos 32 millones de votantes, los latinos están dispersos ya en varios estados, pero tienen una presencia fundamental en aquellos que Trump o Biden deben asegurarse para garantizar su victoria, como Arizona, Florida o Texas.
El analista Augusto Salvatto apunta que “el voto latino está tomando una renovada importancia porque este sector de la población no solo está creciendo rápido, sino que está cambiando en su composición demográfica”. “Los hijos de latinos nacidos en EEUU son los que lideran ese crecimiento y eso puede generar cambios en Estados muy disputados, como Arizona, Florida, Nevada o incluso Texas. El gran desafío de los demócratas será lograr movilizarlos”, agrega.
Según una encuesta nacional divulgada en agosto, el 64 por ciento de los jóvenes latinos aseguraba que votarán en noviembre, cifra que en California llega al 73 por ciento. Y los sondeos muestran que entre el 45 y el 62 por ciento de ellos lo hará por Biden, que necesita mejorar esos números.
Demócratas o republicanos. “El voto latino en las últimas elecciones ha demostrado ser más afín a los demócratas e inclusive las estadísticas sobre votantes latinos registrados muestran que dos sobre tres votantes tienen preferencias electorales afines a las demócratas”, recuerda Ariel González Levaggi, director del Programa de Estudios sobre Estados Unidos de la UCA.
Para este especialista, “en esta elección es difícil que se repitan los números de la última elección donde el voto latino se volcó masivamente a Hillary Clinton, aunque la diferencia será nuevamente abultada” a favor de Biden, agrega. Sin embargo, el problema es que los demócratas suelen dar por hecho el apoyo de los latinos y no diseñan estrategias específicas para aumentar el voto por Biden, pese al terrible historial de Trump hacia los inmigrantes, los insultos a los mexicanos o la construcción del muro.
“Definitivamente existe una brecha de entusiasmo que crece aún más debido a la falta de inversión y atención en estrategias para motivar al electorado latino a votar en noviembre”, dice Sonja Díaz, directora de Latino Policy & Politics Initiative (Iniciativa Política y Política Latina) de la Universidad de California.
Para continuar leyendo, haga clic en el siguiente link.