Brasil registró en las últimas 24 horas 1.271 nuevas muertes por el COVID-19, con lo que el número de fallecidos superó los 116.000, así como 47.134 nuevos contagios, que ubican el total de casos confirmados próximo a los 3,7 millones, informó este martes el Ministerio de Salud.
Según el último de la cartera de Salud, Brasil acumula 116.580 muertes y 3.669.995 contagios de coronavirus desde que registró el primer caso de la enfermedad, el 26 de febrero, hace seis meses.
Las cifras confirman a Brasil, con sus 210 millones de habitantes, como el segundo país con más víctimas y casos de COVID-19 en el mundo, tan sólo superado por Estados Unidos, y como uno de los epicentros globales de la pandemia.
Como ocurre generalmente los martes, cuando los números son actualizados luego de la caída de las muertes y los casos en los fines de semana por la reducción de funcionarios procesando los datos, la cifra de fallecidos y de contagios volvió a crecer.
El número diario de fallecidos, que venía bajando desde 1.212 el miércoles de la semana pasada hasta 1.204 el jueves, 1.054 el viernes, 892 el sábado y 494 el domingo, subió ligeramente hasta 565 el lunes, pero este martes prácticamente dobló, con los 1.271 registrados.
El total de contagios, por su parte, cayó desde 50.032 el sábado hasta 23.421 el domingo y 17.078 el lunes, pero casi que triplicó este martes, con los 47.134 reportados.
De acuerdo con los datos del Ministerio, el número de pacientes que se ha recuperado y fue dado de alta subió hasta 2.848.395, lo que representa el 77,6 % del total de contagiados, mientras que otras 705.020 personas (19,2 % de los infectados) continúan bajo cuidados médicos.
Pese a las elevadas cifras de fallecidos y casos, las informaciones indican que la pandemia comienza a estabilizarse en el gigante sudamericano y que el país aparentemente ya pasó por el pico de la curva de contagios.
Tras varias semanas con una media de más de mil fallecimientos diarios, el promedio diario de nuevas muertes en los últimos 7 días se ubicó el lunes en 971, con una bajada del 3 % frente al registrado hace dos semanas.
De la misma forma, el promedio diario de nuevos contagios en los últimos 7 días cayó el lunes a 37.712, con una reducción del 13 % frente al registrado dos semana antes.
PREOCUPACIÓN POR POSIBLES REINFECTADOS
Sin embargo, el posible registro de casos de reinfección se convirtió en un nuevo motivo de preocupación para las autoridades brasileñas.
El Hospital de las Clínicas de la ciudad de Sao Paulo informó este martes que investiga siete posibles casos de reinfección de COVID-19.
Los siete pacientes bajo sospecha están siendo sometidos a exámenes clínicos “adicionales” después de presentar síntomas y dar positivo en test de diagnóstico “en dos periodos diferentes”.
Las autoridades de Hong Kong confirmaron el lunes el primer caso documentado de reinfección en el mundo y Holanda y Bélgica informaron este martes de los dos primeros casos de reinfección en Europa.
Este martes, igualmente, uno de los hijos del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, informó que se convirtió en el cuarto miembro de la familia en haber contraído la enfermedad, que ya le fue diagnosticada al propio Jefe de Estado y a la primera dama.
El senador Flavio Bolsonaro informó en las redes sociales que contrajo el coronavirus pero que no presenta síntomas, y que permanecerá recluido en su domicilio.
Bolsonaro, líder de una emergente ultraderecha brasileña, es uno de los gobernantes más escépticos sobre la gravedad de la enfermedad, a la que llegó de tildar de “gripecita”, y desde un comienzo ha manifestado más preocupación con los efectos económicos de la crisis. /EFE