Aunque los voceros oficiales aseguran que el acatamiento de la medida del distanciamiento social ronda el 90 %, la realidad es otra en las calles de zonas populares como Catia y Petare, y en lugares de adquisición de bienes de primera necesidad.
Por Contra Punto
En Caricuao, para los comerciantes las primeras horas del día transcurren con la normalidad de antes de la emergencia por la pandemia para los comerciantes y solo se le suman elementos como el tapabocas y guantes de látex para evitar la propagación de la COVID-19.
El volumen de personas casi no presenta variación con respecto a días previos a la llegada de la pandemia y el distanciamiento social no se respeta, hasta el mediodía, cuando funcionarios de las FAES hacen cerrar todos los establecimientos y piden a los ciudadanos ir a sus casas.
Un estudio de Google sobre la movilidad de las personas durante la pandemia, revela que en Venezuela la asistencia a centros de trabajo solo disminuyó 25% y la presencia en zonas residenciales solo se incrementó 16%, a pesar de ser uno de los primeros países en ordenar el aislamiento social