Desde la isla de la música, muchos artistas cubanos tratan de mantener arriba el espíritu y a los isleños dentro de sus casas: un festival online busca alegrar y a la vez concienciar a un país que aún no decreta medidas de cuarentena pero ya sufre los primeros efectos de la epidemia de coronavirus.
Imposible hasta hace casi año y medio en Cuba, que apenas en diciembre de 2018 activó el servicio de datos móviles 3G y en octubre pasado abrió el acceso a la 4G, la iniciativa surgió tras la decisión del Gobierno de suspender todos los eventos culturales masivos ante la amenaza del Covid-19.
El primer festival musical totalmente online hecho desde Cuba se llama muy apropiadamente “Tunturuntu pa’ tu casa”, apelando al sempiterno humor cubano en el que para despedir a alguien se “le da tunturuntu”, porque suena mejor que decirle “tumba, tumba” o “por favor, vete que ya estás de más”.
MÚSICA CUBANA EN VIVO DESDE CASA
“Gástate unos megas a cambio de felicidad” es la propuesta de la plataforma de promoción de la cultura cubana “Tunturuntu”, que organiza el evento y ya ha logrado reunir a unos 30 creadores de varios géneros.
Entre ellos el jazzista Eduardo Sandoval, la cantante Eme Alfonso, las DJs Pauza y el rockero David Blanco, uno de los primeros cubanos que se unió al movimiento impulsado por artistas de renombre mundial como Alejandro Sanz y Bono, que animaron a sus seguidores con miniconciertos y el pedido de #quedateencasa.
Las presentaciones virtuales de los isleños comenzaron este miércoles 18 desde sus perfiles oficiales en Facebook o Instagram y durarán al menos hasta el próximo domingo. En las redes sociales y la web de “Tunturuntu” se puede consultar el calendario con las horas de Cuba y España.
El pianista Chucho Valdés, una de las leyendas vivas de la música cubana, también se ha unido a sus colegas -aunque no desde el festival- y ha pedido a las personas guardar distancia para evitar la propagación del virus.
El ganador de 10 Grammys ya regaló un espectáculo íntimo de 20 minutos a través de Facebook Live, presentación que prevé repetir este jueves también en esa red social.
Sin embargo, esta iniciativa puede que no llegue a la mayoría de los cubanos. En el país caribeño, los precios de la internet móvil son aún caros en relación con el salario estatal medio, que no llega a los 45 dólares mensuales. Los paquetes de datos oscilan entre los 5 dólares por 400 Megabites a los 30 por 4 Gigabites.
FRONTERAS ABIERTAS Y VIGILANCIA SIN CUARENTENA
Con once casos de Covid-19 ya confirmados -uno de ellos fallecido-, Cuba aún no ha decretado cuarentena, pero sí ha suspendido espectáculos y eventos masivos, entre ellos el próximo Congreso de la Juventud Comunista y la Serie Nacional de Béisbol, su principal cita deportiva.
Desde los medios, todos estatales, se recomienda evitar aglomeraciones y tomar medidas higiénicas como lavarse frecuentemente las manos y desinfectar superficies.
A diferencia de sus vecinos, La Habana ha decidido mantener abiertas sus fronteras. Las autoridades afirman que es seguro seguir recibiendo turistas porque mantienen seguimiento y control sobre el estado de todos los viajeros que entran al país.
Estas explicaciones han sido recibidas con escepticismo en las redes, donde aumentan las peticiones de los internautas cubanos de que se cierren los aeropuertos.
De los once enfermos confirmados tres son italianos, un estadounidense, un canadiense y el resto cubanos que han viajado a España o Estados Unidos, o han tenido contacto con familiares que han regresado de Italia.
La primera víctima del virus en Cuba fue un italiano de 61 años que falleció este miércoles tras pasar dos días en cuidados intensivos.
El último caso reportado hasta ahora fue el de un canadiense de 57 años que entró al país por la ciudad de Holguín (este) el sábadp pasado. Es el primer positivo en el oriente cubano.
Unas 400 personas permanecen aisladas por presentar síntomas o haber estado en contacto con los infectados.
En toda la isla permanecen abiertas las escuelas, universidades, centros estatales de trabajo y comercios, frente a los que se aglomeran las personas para comprar alimentos y artículos de primera necesidad.
Tampoco se han decretado toques de queda oficiales ni limitaciones en los horarios de establecimientos como restaurantes y bares.
Por iniciativa propia, varios negocios privados cubanos han puesto el cerrojo en La Habana como medida de precaución, entre ellos La Guarida, la “paladar” más famosa de la isla; el proyecto de tours en bicicleta Citykleta y la Fábrica de Arte Cubano, uno de los centros de la vida nocturna de la capital. EFE