Este jueves 10 de octubre, los trabajadores de la salud salieron una vez más a las calles de Caracas para protestar en rechazo a los bajos salarios, lo que aseguran los ha condenado a niveles de pobreza extrema.
Por diariolavoz.net
Desde las afueras de la Maternidad Concepción Palacios, personal médico, obrero y enfermeras que labora en el centro asistencial, manifestaron para condenar una vez más los bajos salarios implementados por la administración del presidente Nicolás Maduro a todo el sector salud.
Así lo confirma una de las trabajadoras del lugar, quien aseguró que en medio de la emergencia humanitaria compleja que vive Venezuela, sumada a la crisis económica, los ciudadanos están en un estado de desprotección y vulnerabilidad.
Detalló que todos los trabajadores de la salud se encuentran en niveles de “pobreza extrema”, y explicó que desde que comenzó esta situación cada vez “vivimos más pobres”.
Durante su participación en la protesta, la mujer explicó que incluso su vida y la de su familia están en riesgo. “Yo vivo en La Vega, en un parte alta, el cerro está que se me cae en cualquier momento y ahí también se me cae la casa”.
Las palabras de la mujer fueron abaladas por todos su compañeros, quienes entre consignas decían estar cansados de los salarios “miserables” impuestos por el Ejecutivo.
Una enfermera de la Maternidad más grande de la ciudad capital, declaró a Vivo Play que no conforme con los bajos salarios, el personal está obligado a trabajar en condiciones denigrantes. “Trabajamos con las uñas prácticamente. Carecemos de insumos, de batas, de los kits para los pacientes. Ese es el día a día”. Incluso explicó que las parturientas para poder ser atendidas en el lugar deben llegar con su kits quirúrgicos, o de lo contrario no serán ingresadas, lo que da paso al ruleteo por diferentes centros hospitalarios.
Recordó que no se trata solo de los pacientes que no tienen para ser atendidos, sino también del personal. “Somos nosotras también las que pasamos trabajo, las que sentimos la impotencia de que venga una paciente y no la podamos atender”.
Cuenta que tiene 11 años trabajando en la Maternidad Concepción Palacios y nunca antes había visto esta situación. “El hospital va de mal en peor. Estamos viviendo una calamidad que no se puede tapar con un dedo. No es como lo pintan. Eso lo sabemos nosotros que somos los que trabajamos acá. Aquí carecemos de todo, no contamos con nada. Ahorita no hay ni siquiera un analgésico para nuestras pacientes”.
Promesas incumplidas
Pablo Zambrano, secretario ejecutivo de la Federación de Trabajadores de la Salud (Fetrasalud), aseguró que la administración del presidente Nicolás Maduro se ha caracterizado por decir mentiras.
Explicó que es mucho lo que se dice que se hará en materia de salud para mejorar los hospitales, para atender a los pacientes, para el personal que allí labora, pero que realmente es poco o nulo lo que se cumple, e hizo referencia a promesas como la de trasladar a Cuba o a Turquía a los niños de la unidad de hematología del hospital infantil José Manuel de los Ríos, que requieren urgente un trasplante de médula ósea. “Todo lo que dicen es mentira”, dijo Zambrano, quien aprovechó la oportunidad para condenar la nueva iniciativa del presidente Nicolás Maduro de inaugurar mil nuevos Barrio Adentro.
Recordó que al menos un 55 % de los ambulatorios de Barrio Adentro ya existentes están en estado de abandono o fueron invadidos por alguna familia que decidió ubicarse en estos espacios. “Cómo vas a gastar ese realero en eso”, dijo el dirigente sindical de Fetrasalud, quien hizo un llamado al Gobierno Nacional para que invierta este dinero en recuperar los hospitales, “recuperar los equipos, las infraestructuras, para comprar medicamentos y para pagarle a los trabajadores el salario que merecen”.
Pidió dejar de lado las medidas efectistas, que a su juicio solo tienen como objetivo “decir que están haciendo y no están haciendo nada”.
Desde el año pasado
Desde el 2018 los trabajadores de la salud han sido uno de los mayores protagonistas de las manifestaciones de calle, denunciando el deterior de los centros hospitalarios, la falta de insumos médicos o de medicamentos, los bajos salarios y las reiteradas fallas en los servicios públicos.