Al transcurrir las primeras 24 horas del asesinato del exgobernador chavista Jhonny Yánez Rangel, la línea de la investigación sobresaliente indica que lo mataron por venganza.
Por: Notitarde
“Manejamos todas las hipótesis. No podemos descartar nada”, indicó un funcionario vinculado con las diligencias investigativas encaminadas a esclarecer el homicidio del exmandatario cojedeño.
Aunque en principio se creyó que trataba de un secuestro, las autoridades desmintieron tal conjetura. El plagio nunca se materializó porque sus captores jamás solicitaron el pago de rescate alguno.
A Yánez Rangel de 58 años lo sometieron la noche del martes cuando transitaba en un auto Toyota, modelo Corolla, placas AG327KM por un sector de Macaracuay, municipio Sucre del estado Miranda. Los detectives de la División de Investigaciones de Homicidios presumen que horas después mataron al exgobernador y le prendieron fuego al auto junto con su cuerpo.
A los investigadores les llama la atención la sevicia y el rencor demostrado contra Yánez Rangel. Aunque los resultados del peritaje médico legal no concluyen aún, presumen que al exfuncionario lo torturaron, le dispararon y después lo incineraron.
Los expertos se encargarán de establecer si Yánez Rangel estaba vivo a la hora de sufrir el trauma térmico. Lo cierto es que el cuerpo no presenta las extremidades semiflexionadas debido a la acción de las llamas sobre los músculos flexores, lo que en términos forenses se le conoce «actitud pugilista».
Por venganza lo ejecutaron
En las redes sociales los usuarios se han hecho eco de un sinnúmero de presunciones e incluso de una deuda. Las primeras horas de la investigación son consideradas vitales para identificar a los responsables.
El cadáver del exgobernador lo encontraron lugareños del sector Bejarano, en la vía que comunica de los Altos Mirandinos con los Valles del Tuy. Tras el incendio del auto, los asesinos pretendieron borrar cualquier rastro que permita sus identificaciones.
Jhonny Yánez Rangel renunció a su carrera militar para dedicarse a la política de la mano del expresidente Hugo Chávez. Fue gobernador de Cojedes desde el año 2000 hasta el 2008.
Tras su salida del cargo, sus mismos compañeros de tolda lo acusaron de estar vinculados con estafas. También con el crimen organizado en la entidad y de tener testaferros. La Contraloría de la entidad abrió varias averiguaciones en su contra. El organismo lo investigaba por licitaciones fraudulentas, órdenes de pago fantasmas y manejos amañados de fondos públicos.
En el año 2018 un tribual de Caracas le dictó una medida privativa de libertad. Lo acusaban de estafa agravada y asociación para delinquir. Sin embargo, andaba por la calle cuando sus captores lo sometieron para después asesinarlo.