El enviado especial de Estados Unidos para Venezuela, Elliott Abrams, y el secretario general de Asuntos Internacionales del Gobierno español, José Manuel Albares, coincidieron este jueves en que la crisis de Venezuela debe tener una solución política que pase por unas elecciones libres.
Abrams y Albares se reunieron en Nueva York a petición del estadounidense, según fuentes de La Moncloa, que explicaron que el representante estadounidense insiste en que hay que mantener la presión diplomática y económica para lograr el cambio político.
Y Albares, por su parte, le recordó que España rechaza completamente el uso de la fuerza y en cualquier caso actúa de forma coordinada con la UE. También le recordó las sanciones europeas que se han ido aplicando al régimen de Nicolás Maduro, según las mismas fuentes.
Ambos analizaron la situación venezolana y estudiaron qué pueden hacer los dos países de forma coordinada para ayudar a lograr que haya elecciones libres y democráticas en Venezuela y hablaron de qué otros actores pueden ayudar a ese objetivo.
El pasado lunes, los países del Grupo de Lima y Estados Unidos se declararon dispuestos a adoptar nuevas sanciones contra el Gobierno venezolano de Nicolás Maduro y condenaron sus “crecientes vínculos” con “grupos armados al margen de la ley”, en otra reunión que tuvo lugar al igual que ésta en Nueva York.
El mismo día, también en esta ciudad en los márgenes de Naciones Unidas, los países europeos y latinoamericanos que forman el Grupo Internacional de Contacto para Venezuela urgieron al régimen de Nicolás Maduro y a la oposición liderada por el presidente encargado Juan Guaidó a volver a las negociaciones y advirtieron de que la situación del país “no permite más retrasos”.
Con información de EFE