Estados Unidos anunció este miércoles que ofreció una recompensa de hasta 15 millones de dólares al capitán del petrolero iraní Adrian Darya, sancionado por Washington y liberado en agosto de la colonia británica de Gibraltar, por acercar el buque a cualquier país que esté dispuesto a incautarlo.
El Departamento de Estado de EE.UU. promete, además, esa misma recompensa por cualquier “información que permita entorpecer los mecanismos por los que se financia el Cuerpo de los Guardianes de la Revolución iraní (IRGC, en inglés) y sus ramas”, indicó en un comunicado.
“Esto incluye buscar información sobre la venta ilícita de petróleo por parte del IRGC, incluido a través de petroleros como el Adrian Darya”, agregó el comunicado.
El encargado de Irán en el Departamento de Estado, Brian Hook, envió el pasado 26 de agosto un correo electrónico a Akhilesh Kumar, capitán del Adrian Darya 1, anteriormente conocido como Grace 1 y que fue liberado en agosto después de varias semanas retenido en Gibraltar por transportar supuestamente petróleo a Siria.
En su correo, obtenido por el diario The Financial Times, Hook anunció que tenía “buenas noticias” y que podía ofrecerle una jugosa recompensa que le permitiría “tener el tipo de vida” que deseara si llevaba el buque a un país que pudiera incautarse del barco en nombre de Estados Unidos.
Cuatro días después, y ante la falta de respuesta del capitán, Estados Unidos anunció sanciones contra Kumar y su petrolero, pero hoy dejó claro que su oferta sigue en pie.
“Los capitanes y las tribulaciones de barcos implicados en actividades ilícitas, como el Adrian Darya 1, tienen mucho más que ganar del programa de recompensas (del Departamento de Estado) que de Irán”, escribió el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Garrett Marquis, en su cuenta oficial de Twitter.
Las últimas noticias sobre el Adrian Darya 1 apuntan a que su transpondedor (transmisor que recibe señales de radar y que responde con un código con la posición de la nave, su altitud y su frecuencia de radio) ha dejado de emitir señal en su rumbo a Siria, pese a que las autoridades iraníes negaron que ese fuera su destino.
La recompensa ofrecida por el Departamento de Estado se extiende a cualquier información que ayude a interrumpir las fuentes de ingresos del Cuerpo de los Guardianes de la Revolución iraní, que es la principal entidad de seguridad de Irán y al que Washington ya impuso sanciones en octubre pasado.
Además, el Departamento del Tesoro anunció hoy sanciones contra lo que describió como “una extensa red de distribución” de petróleo de Irán, que en el último año ha distribuido crudo por “cientos de millones de dólares” con destino a Siria y China.
El anuncio afecta unas 16 entidades y 10 individuos, e identifica 11 naves, entre ellas el Adrian Darya, como propiedad sobre la cual tienen intereses personas ya sancionadas.
“El exministro de petróleo iraní Rostam Qasemi supervisa esta extensa red que comprende decenas de gerentes navieros, buques y facilitadores”, indicó el Tesoro en un comunicado. “Esta red compleja de intermediarios permite que la Guardia Revolucionaria oculte su papel en la venta de petróleo iraní”.
EFE.